¿En qué consiste?
Ya sea con tu familia, amigos o en la oficina, siempre hay un intercambio incómodo al que uno le tiene que entrar sí o sí. Hacen los papelitos y, como dicta la ley de Murphy, siempre te va a tocar la persona que más mal te cae.

¿Por qué nos molesta?
El numerito es incómodo y casi siempre ponen un rango de precios del que no te puedes seguir. Es feo tanto si ponen poco dinero (¿qué comprar con poco?) como si es mucho, porque a nadie le gusta gastar los millones de pesos en gente que ni siquiera te importa. Y después, ¿tarjeta o no? ¿Personalizado o no? ¿Abrazo incómodo o no? Tantas preguntas, tantos cuestionamientos…

¿Qué preferiríamos en su lugar?
Que el jefe les diera a cada uno un certificado de regalo por mínimo 500 pesos, para que cada quién se dé su gustito. Y si no, tú da un certificado también: es el regalo ideal.