Ni alequipo de "investigadores" de Laura Bozzo se le habría ocurrido grabar lo queun esposo engañado obtuvo en video y generosamente transmitió al mundo.

El peruano de 39 años del que hablamos sospechaba de que suesposa, Teodolinda Amaya, le estuviera siendo infiel con el sacerdote de la iglesia a la quehabitualmente iba la familia (padre, madre y tres hijos) y, con cámara devideo en mano, decidió documentar el engaño.

En silencio entró a lashabitaciones del cura, atravesó una capilla y el área de visitas yal fondo –en la habitación de José Antonio Boitrón– tuvo la paciencia suficiente como para grabarunos segundos a su mujer mientras tenía relaciones sexuales con el padre.

Finalmente, con gritos, interrumpió a la parejita Aunque ¡claro!, sin dejar de grabar.

Cualquier parecido con la película mexicana dirigidapor Carlos Carrera en 2002, es mera coincidencia.

Aunque este sacerdote no está tan guapocomo el charrolastra, Gael García Bernal, sí es igual de cínico que el actor.

<a href="https://www.youtube.com/watch?v=Mi64w_j5JAc">https://www.youtube.com/watch?v=Mi64w_j5JAc</a>

"Ahorita voy y denuncio a la policía" –dijo elmarido, sin dejar de grabar–.¿Cómo dice que está haciendo limpieza y engañandoa mis hijos?", gritó.

"Cálmese, cálmese –respondió el cura–. Yoreconozco… Es mi falta, es una trampa que me han tendido, en la que yo hecaído", balbucea el sacerdote mientras cubre su desnudez con una sábana.

¡Hijo de Dios! ¿Es una trampa que le hantendido? Seguro estos señores también se hacen un autolavado de cerebro cuando violan a niños, ¿no?Un usuario de Youtube opinó al respecto: "¡vamos progresando, no fue con una menorde edad!".

Pero la nota no termina aquí. La mujer, quienaseguró era forzada por el sacerdote José Antonio Boitrón, reveló que su embarazo de cuatro meses es producto de estas relaciones y obviamente reclamó nosólo el reconocimiento de la paternidad sino también una indemnización por quinceaños de servicios trabajados en la parroquia.

Y sí, chilangos, hay más: los feligresesrespaldaron al cura. No bueno…