Está en el
archivo de científicos locos que perdieron la frontera entre sus experimentos
y la vida real, es decir, se les botó la canica. En esa ruptura él
y sus armas se mezclaron tanto que hoy son uno mismo.
Otto Octavius
es un cyborg que jugaba con los poderes de la física y hoy tiene
tentáculos inteligentes y poderosos que muchas veces toman decisiones
por él.