La semana pasada nos enteramos de que vinieron a la ciudad muchos señores trajeaditos –más de 100– para hablar de las políticas públicas y la gestión de presupuestos entorno al cambio climático, su propósito era conseguir un Pacto de la Ciudad de México (luces y tambores).

Estos señores eran alcaldes y políticos de ciudades como París, Los Ángeles y Tokio y de países tan distantes como Islas Seychelles. Todos ellos llegaron a nuestrabella ciudad para asistir al Tercer Congreso de Ciudades y Gobiernos Locales Unidos (CGLU), auspiciado por nuestro Jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard.

Todo estuvo muy bonito: la finísima visita paseó por Garibaldi y fue sorprendida con una inauguración espectacular… Oh, sí; oh, sí.

Para el carnal Marcelo pareceque vivimos en otro lugar. Tanto que hasta los asistentes al congreso lonombraron embajador para entregar el Pacto de la Ciudad de México alas delegaciones de países que asistirán a la COP 16 (que se celebrará del 29 de noviembre al 10 de diciembre eb Cancún, Quintana Roo). El dichoso pacto será firmado en la Cumbre Climática Mundial de Alcaldes, no nos confundamos es la misma reunión pero con otro nombre.

Todos los que vivimos acá sabemos que la realidad de nuestra ciudad es bien distinta. Es triste que mientras los anfitriones quieren pararse el cuello con tanta presumidera, la ciudad de México esté llena de problemas. ¿Les hablaron a los visitantes de la supervía? ¿Cómo van con los transportistas? ¿Y con los del SME? ¿Qué hay con el cambio climático? ¿Cuando nos ayudaron a los chilangos a desarrollar una conciencia ambiental de verdad efectiva?

Está padre que en el DF –y en cualquier ciudad de nuestro país– haya conferencias, cumbres, congresos y demás eventos internacionales; es bien gratificante eso del intercambio de informacióny de técnicas, son cosas que además de transmitirse, pueden adaptarse anuestro país. Pero si de verdad quieren combatir el cambio climático ¿por qué no mejor los gobiernos de México se concentran en ofrecer transporte públicode calidad, que mejore la vida de los ciudadano? (qué, por cierto, fue el argumento central de la reunión pasada).

Pero, bueno, a ellos les funciona así. Tal vez deberían empezar a entender que a nosotros ya no.