Las última de las 11 experiencias de #Chilango11 (por nuestro décimo primer aniversario) fue un viaje del 12 al 14 de diciembrecon 5 suscriptores (cada uno con un acompañante) a la tierra del mezcal: Oaxaca.

Luego de hospedarnos en elHotel Casa Sierra Azul (un lugar pequeño pero muy agradable, ubicado cerca del centro), la primera parada fue el restaurante de Los Danzantes, en el que los ganadores probaron un delicioso quesillo fundido con huitlacoche y chapulines, preparado conepazote y chile serrano, seguido por un pescado ceniza sobre mole amarillo y de postre un flan de queso de cabra con toques de chocolate.

Quesillo fundido con huitlacoche y chapulines #Chilango11

Una foto publicada por Chilango — Revista y Web (@chilangocom) elDic 12, 2014 at 2:44 PST

En la noche tocó una clase de mezcalinis en el Restaurante Tres Bistro (estilizado como Tr3s 3istro) y cena en el mismo lugar. Ahí nuestros lectores aprendieron dos cosas sobre esta bebida: Que al mezcal no se le dan tragos, sino besos; y que al brindar con este destilado se dicen la frase “¡Hasta no ver la cruz!”, pues allá se sirve en vasos de veladora, los que suelen tener una cruz en el fondo.

¡Hasta no ver la cruz! ¡Salud! #mezcales #Chilango11 #Oaxaca

Una foto publicada por Chilango — Revista y Web (@chilangocom) elDic 12, 2014 at 4:11 PST

Terminamos el día enSalón Central, donde a eso de las 12:30 de la mañana salió al escenario el grupo Polka Madre para poner a todos a brincar. Un día después desayunamos en El Milenario,un lugar más tradicional donde las tlayudas, el chocolate de agua y otras delicias no pudieron faltar. Una vez con el corazón contento fue momento de contemplar con maravilla el árbol del Tule.

A desayunar atole de pinole y pan de yema en Oaxaca #Chilango11

A photo posted by Chilango — Revista y Web (@chilangocom) onDec 13, 2014 at 7:39am PST

Nuestro siguiente destino fue la Casa Armando Guillermo Prieto, lugar donde se hace el mezcal Zignum. Los lectores escucharon el proceso tradicional e industrial de realización del de esta bebida y, de paso, firmamos una barrica de roble francés donde añejan Zignum.

Nos invitaron a firmar una barrica de roble francés donde añejarán Zignum Mezcal. Así nos quedó. #Chilango11

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Más tarde También visitamos el pueblo de Coyotepec, donde aseguran que Doña Rosa inventó el barro negro allá por 1953. El artesano nos explicó que tallando el barro con un cuarzo se bruñía y al cocerlo entre 8 a 10 horas no se volvía gris, sino negro.

Y ahora estamos viendo cómo se hace un cántaro de Coyotepec #BarroNegro #Chilango11 #Oaxaca

Un vídeo publicado por Chilango — Revista y Web (@chilangocom) elDic 12, 2014 at 1:46 PST

No podíamos irnos de esta tierra mágica sin visitar Monte Albán,y fue nuestro primer destino en nuestro último día; dato curioso, nuestro guía era ni más ni menos que Nezahualcoyotl (así se llamaba el señor, un hombre muy orgulloso de sus raíces prehispánicas). Después nos adentramos en un pueblo donde se hacen alebrijes tallados en madera.

Así terminó nuestro viaje por el sur del país. A lo largo de las 11 experiencias conocimos a más de 100 de nuestros lectores, entre ellos uno que nos sigue desde nuestros inicios, así como uno de los más recientes suscriptores. Fue un gusto compartir nuestros once años con todos ustedes.