Corrían los noventa e íbamos en la primaria o secundaria. Teníamos más barrotes que el penal de Almoloya y los cambios hormonales hacían presa fácil de nosotros. Era de esperarse que nuestros gustos musicales no fueran los mejores, ¿qué íbamos a estarnos preocupando de teoría musical, cuando lo que más nos importaba era que lo que dijeran de nosotros en los chismógrafos?

Así que aunque ahora lo niegues y te dé osito panda, aquí te recordamos 10 rolas infames de aquellos ayeres que seguro canturreabas y que a lo mejor sigues teniendo en el iPod como gusto culposo.

Popocatépetl – Fey

Si de letras profundas se trata, esta rola se la mata a cualquier arjonismo. Y es que por mucho que le busques, detrás del Narana Pum, Pum, Popocatépetl, narana nara ie” hay muy poco para analizar. La rola encuentra su punto cumbre con el rapcito que muy pocos recuerdan íntegramente y que no es apto para fumadores, porque requiere de toda su capacidad pulmonar para cantarlo completo: unaflordecalabaza delcolordelamoztaza hallegadohastamicasa enelsobredeunacarta conunacuartillablanca dondecomocasisiempre hablasynodices nada. (Tomen aire). ¿Quésucedequétepasa quehacemásdeunasemanaquenisiquieramellamas? Quédemoniosquécaramba comotepilleconotra tevoyaromperlacara tevoyamorderunojosabesqueloharé. Chulada del arte contemporáneo, Yayoi Kusama qué.

Mis ojos lloran por ti: Big Boy

Un temazo que empezaba como una llegadora balada al más puro estilo de Son by Four (¿alguien los recuerda?) y después se convierte en una especie de merengue house muy parecido al actual reggaetón, nada más que con una letra con más amor y menos gasolina. También representa un reto cantar sin parar la parte de “quisieravolveraamartevolveraquerertevolveratenertecera de mí”. Al final no sabíamos si llorar o ponernos a perrear porque aunque la letra era desgarradora, el ritmazo estaba con todo.

Pepe – Jeans

“Poca tarea y no terminas de hacerla, puede esperar porque el Nintendo te espera (¡!), como tus cuates sólo piensas en cómics y mientras tanto mi alma se desespera”. Este temazo (ajá) se desprende del disco homónimo de las chavas de Jeans y era un himno de toda muchachita que tuviera un José al que secretamente amaba. En la rola participaba la alineación original del grupo, conformado por Angie, Patylú, Litzy (ahorita nos vamos con ella) y Tabatah, quien después junto a Natalia Lafourcade y Pamela, fundaron el grupo Twist. Si tiene tiempo, busque “Late mi corazón” de Twist y constate que Natalia no siempre fue hipster.

No te extraño – Litzy

Esta rola fue el debut de Litzy después de haber abandonado Jeans. Litizy Vanya Domínguez Balderas (ah, pa’ nombrecito) fue la primera en saltar del barco de Jeans, pues se decía que las otras integrantes eran muy manchadas con ella, al grado de dejarla encerrada en la habitación en las giras y hacerle bullying por ser morena. Pero Litzy nada mensa estaba consciente de que era guapetona y además tenía buena voz, por lo que se lanzó de solista con su disco “Transparente” (cuya cajita era transparente, bien novedosa ella) y el tema con el que inició la promoción fue No te extraño. A la canción le fue tan bien que se ponía al tú por tú con los temas más picudos del eurodance y Litzy ya se veía como estrella internacional. Su segundo disco “Más transparente” ya no pegó tanto y el tercero llamado “La Rosa” no lo compró ni su mamá. Bien triste.

Me acuerdo – Vico C

Otro rolón precursor del reggaetón y tintes de hip hop como para cortarse las venas con galletas Marías. En esta rola, Vico se ponía bien profundo narrando la historia de una relación destructiva que culmina en la muerte de su amada. Datos inútiles sobre Vico C: aunque nació en Nueva York, pronto su familia se mudo a Puerto Rico y allí se estableció. El chamaco en realidad se llamaba Luis Armando, pero sus amigos le decían Vico pues tenía una vecina llamada Vica quien era muy seria, como él. Este carácter serio lo conservó durante toda su carrera, haciendo que incluso lo llamaran “el filósofo”. A pesar de que se mantuvo activo de los noventa a la fecha y con cierto reconocimiento en su tierra, no volvió a colocar un hit internacional de ese nivel.

https://www.youtube.com/watch?v=z7NGZWD0bf4

La culebra – Banda Machos

Era el año de 1992 y la banda sonaba en todos lados. Bailar de brinquito no era mal visto y hasta en las fiestas más “acá” los temas de La Machos sonaban con todo. La Culebra es quizá junto con el “Mambo Lupita” de mi Banda el Mexicano la canción más recordada de este género. Además de La Culebra, la Machos posicionó otros hitazos como Un indio quiere llorar, Al gato y al ratón y La secretaria. Lo que hizo que esta rola se quedara estampada en el imaginario colectivo fue que esta sonaba mientras Colosio era asesinado en Lomas Taurinas. Se dice que esta canción era la señal para que el asesino disparara contra el entonces candidato a la presidencia, precisamente en la parte que decía “si me muerde los pies, yo la tengo que matar”. Gulp.

El Tiburón – Proyecto Uno

El que no se haya echado esta rola en una boda que tire la primera piedra. Y es que si de hacer desfiguros se trata, las canciones guapachosas nos dejan darle vuelo a la hilacha y dejarnos ir como hilo de media. Por supuesto, al bailarla hay que hacer el pasito de juntar las manos sobre la cabeza y fingir que son una aleta de tiburón, si no es como no haberla bailado. Los muchachos de Proyecto Uno fueron los meros meros creadores del ritmo merenhouse (fusión de merengue y house con toques de hipo hop), al que después se unieron Los Ilegales y Sandy y Papo. Tal vez la única rola de merengue que le compita en las bodas sea El Venado. ¿Qué diría Freud de esta fijación con los animales?

https://www.youtube.com/watch?v=XUAfqQLEvlM

La Calle de las Sirenas

No sabemos de cuál se fumó el escritor de esta rola, pero su pachequez vaya que fue redituable: esta rola de Kabah fue una de las más memorables de toda su discografía, logrando que el disco del mismo nombre haya vendido la nada desdeñable cantidad de 2.3 millones de discos. En sus buenos tiempos Kabah se mantenía al tú por tú con Onda Vaselina, distinguiéndose de estos por incorporar sonidos más experimentales (bueno, poquito) y looks más arriesgados. Que levante la mano el todavía la tenga en su iTunes. Pos qué, sin pena.

Te quiero tanto, tanto. – La Onda Vaselina

Cuando parecía que La Onda Vaselina estaba condenado a la extinción, el grupo de mocosos creado por Julissa tuvo su segundo aire cuando los chamacos crecieron y lanzaron el disco Entrega Total. De ese disco se desprendieron temazos poperos como “Mírame a los ojos” y “Un pie tras otro pie”, siendo Te quiero tanto la balada más pegadora del disco y tema de la telenovela Mi pequeña traviesa (albures aparte). ¿Quién no la ha cantado a todo pulmón en un karaoke ya con unos alcoholes encima? Ay sí, ahora resulta que todos muy alternativos. ¡Sáquense!

Bidi bidi bom bom – Selena

Y cerramos este recuento ni más ni menos que con la reina del Tex Mex, Selena. A pesar haber muerto muy jovencita y con su carrera en ascenso (no olvidamos lo que hiciste, móndriga Yolanda Saldívar), 23 años le bastaron para tener hitazos como La carcacha, El Chico del apartamento 512 y Amor prohibido, rola que hasta cover “rockero” tiene, creado recientemente por Moderatto. Bidi bidi bom bom era una de sus rolas más pegajosas y en la que Selena se aventaba un movimiento de cadera que se andaba echando un quien vive con Shakira. Ya son veinte años de que pasó a mejor vida ¡pero ah ah, ay, cómo nos duele!

¿Qué onda, disfrutaron el recuento? Ya que andamos encarrerados, dígannos qué otros gustos culposos tienen de aquellos ayeres, digo, estamos en confianza y ya todos aquí sacamos el cobre. ¡Venga, presuman lo más “pior” de su repertorio noventero!

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