Tezka fue el primer restaurante de la ciudad de México que figuró en una lista internacional de restaurantes como la St. Pellegrino. Tiempos en los que Juan Mari Arzak estaba detrás del concepto y Bruno Oteiza y Mikel Alonso al frente de la cocina. En su segunda etapa el chef Pedro Martin se encargó de darle nuevos brios al lugar: estrenó un nuevo menú,remodeló el comedor y luego se fue para abrir su propio restaurante.

A casi un año de su salida el Tezka no ha restablecido la figura de su jefe de cocina y todavía conservan en la carta las creaciones que Martin dejó. Su ausencia se siente en el comedor (que no tiene la afluencia que solía) pero la comida conserva su toque.

Para empezar la casa te manda un aperitivo con pequeñas muestras del menú de temporada, en este caso un shot de crema de hongos con un toque de perejil, un plato de aceitunas (un producto que España está impulsando en México), aceite de oliva virgen y pan.

Para continuar pedimos la sopa de pescado "a nuestra manera", que lleva migas de pan, pescado deshebrado. La sirven a muy buena temperatura pero con poco sabor.

Con el cochinillo confitado la experiencia mejoró: vienen dos porciones selladas por los bordes, con la carne suave al centro y un baño con el mismo jugo de la carne. Todo combina con las guarniciones: cebolla en reducción de vino tinto y espinacas.

Para el final pedimos una tabla de quesos en lugar del postre: cabrales, de oveja, camembert y manchego, acompañados con el pan de tu elección (integral, con pasas o chapata).

Si bien el lugar ya no goza de su antiguo resplandor sigue siendo un lugar para comer bien y con buen servicio en la Zona Rosa.

Facebook.com/TezkaZonaRosa