Este lugar nació con la idea de ofrecer varios de los productos que se utilizan en los diferentes restaurantes de Grupo Contramar: Contramar, Entremar, Merotoro y Barracuda. Sin embargo, poco después de su apertura, esta “tiendita de abarrotes” dio paso a su sección de comida preparada. El menú es sencillo: sándwiches, ensaladas; recetas que crearon en colaboración con el staff de Pichón (un bufet itinerante), con sugerencias nuevas cada semana. La idea es que llegues, lo pidas para llevar o lo comas en su pequeña barra.

Todos los días hay agua de frutas y aromáticos (como betabel, limón y jengibre) que “maridan” con la cocina que, sin caer en etiquetas, se inclina por menús vegetarianos, veganos y orgánicos. Es así como puedes encontrar un sándwich de pollo rostizado con queso crema y mermelada de chile morita que presentan en un pan chapata hecho en casa. Es pequeño pero llenador.

Para el postre date una vuelta por la tienda y checa sus productos: piezas de pan, pastelería, piloncillo, miel, merengues con flor de jamaica y bolsitas para el monchis saludable, como chips de nopal deshidratado con chile de árbol o un garapiñado de pepita, cacahuate, chile morita y sal de mar; además de vinos y cervezas artesanales.