El chef Emilio Ituarte no es un convencional cuyo único sueño sea cocinar y después de él, el diluvio. No. Para Ituarte, cocinar y gerenciar están intimamente ligado por ende sus restaurantes no sólo son maneras de hacer arte sino de hacer negocios.

Obviamente, el restaurante Emilio no podía ser de otra manera. Situado en Polanquito con una fina terraza que bordea el parque Lincoln, de su cocina emanan aromas que combinan la cocina vascas con elementos tradicionales mexicanos.

Emilio ofrece entre sus entradas los clásicos de la carta: croquetas de jamón serrano, los tacos de lechón y las alubias con chorizo tierno. La estrella del lugar es el arroz caldo de bogavante, un rico arroz de cremosa textura que hará que se derritan en tu boca las ganas de comer otra cosa.

Aunque, pensándolo bien, el arroz de butifarra blanca, pimiento rojo escalivado con picada de ajo y perejil es una opción más que respetable si buscas cerrar un negocio con un socio o costillas de cordero a la brasa con espinacas a la crema y majada de hierbas, si lo que buscas es conquistar a un chica.

Estos platillos son pensados para dos personas y el costo por cubierto es de $30. La cava de vinos de este lugar, es copiosa y selectiva. No sólo cuentan con vinos internacionales (chilenos, argentinos, franceses) también cuentan con una importante reserva de vinos mexicanos y los meseros con mucho gusto te recomendarán el maridaje conveniente.