¡Revive un viejo romance! Prueba el menú de la boda de Frida y Diego
El mole ancestral –de hormiga chicatana y pulque– te conquistará como lo hizo en 1929 con los invitados a la boda de Frida Kahlo y Diego Rivera.
Por: Colaborador
Uno de los amores de Frida —después de Diego— fue la comida. Su romance con ella fue igual de apasionado, pero menos tóxico. Ella no cocinaba; sin embargo, dirigía a la perfección los menús que se daban cita en su casa e iba al mercado por los ingredientes del mole de pato y el huauzontle. Por eso, la boda de Frida Kahlo y Diego Rivera fue un gran festín del que se ha hablado mucho y ahora será recreado en esta cena, que tuvo su génesis para rendir tributo a Frida y su mexicanidad.
Coyoacán, donde vivió gran parte de su vida, ha sido protagonista de ese amor y desamor. En ese mismo escenario sureño, la chef Mónica Lozano quiere revivir esa historia en seis tiempos de la cena maridaje “Con sabor a pueblo y un toque burgués”, inspirada en la boda de Frida Kahlo y Diego Rivera. Esta experiencia se vivirá en Restaurante Frida.
Mónica Lazcano se identifica en la historia porque le recuerda los 18 años de infidelidad que vivió en su matrimonio de 25. Vivió dolores, angustias y enojos por entender las malas situaciones que atravesó en su vida, como Frida. Cuando dio por terminado su matrimonio montó su primer restaurante y ahora quiere rendir tributo a ese icono de mujeres libres.
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¡Échame el menú!
La crema de ostiones ($95) aparece sobre la mesa como el primer tiempo. A diferencia de la cena original, en la que Frida dispuso de una sopa, aquí se sirve en versión de crema con ajos horneados con todo y cáscara para darle un ahumado rico. Los ostiones se perfuman con el perejil y los trozos de chicharrón le dan el crunch necesario.
Aunque —como era costumbre con Frida— esa noche hubo pulque y tequila; el restaurante prefiere los vinos para maridar mejor. Los ostiones van con vino blanco porque ayuda a refrescar el paladar ante los rostizados y el ajo.
Foto: cortesía de Restaurante Frida
Como segundo tiempo está el arroz blanco, los plátanos fritos y los chiles rellenos que se acompañan con elotes tostados para regular el picor del chile jalapeño ($120). Después, llega el mole ancestral ($120), uno de nuestros platos más recomendados si llega a pedirlo solo. Se acompaña con esferas de huauzontle relleno de queso de cabra y arándanos, servidas sobre el espejo de mole ancestral de hormiga chicatana y pulque. Las hormigas crujen en la boca y dan certeza que este era también uno de los platos predilectos del Emperador Moctezuma.
Foto: cortesía de Restaurante Frida
El pozole ($100), como cuarto tiempo del menú, no es prescindible pero después viene algo mejor: el mole oaxaqueño ($165), sazonado con chile chilhuacle negro y rojo, chile pasilla, mulato, orégano, jitomate y tomate tatemado. Se sirve con carne.
Para cerrar con broche de oro, el flan ($65), otro de nuestros favoritos. Lleva un toque de mezcal en el caramelo y migas de brownie de mole. Y es que, pese a que la vida de Frida tuvo sabores amargos, a ella le gustaba festejar la vida misma. Ya lo expresaba en su frase: «¡Viva la vida!»
Foto: cortesía de Restaurante Frida
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Menú inspirado en la boda de Frida Kahlo y Diego Rivera
Dónde: Restaurante Frida: Calle Salvador Novo 8, Barrio Santa Catarina, dentro del Centro del Patrimonio
Cuándo: del 9 al 27 de agosto a las 19:30, reservaciones al 5554 4441
Cuánto: El menú “Con sabor a pueblo y un toque burgués”, inspirado en la boda de Frida y Diego, cuesta $890 y son seis tiempos con maridaje. Los platos del menú también se venden por separado
