“Yo sí estaba en onda, pero luego cambiaron la onda y ahora la onda que traigo no es onda y la ‘onda’ de onda me parece muy mala onda ¡Y te va a pasar a ti!”, sentencia un maduro Abraham “Abe” Jebediah Simpson a su hijo adolescente quien asegura que va a rockear “forever”.

¿Pero cuál es esa Onda a la que se refiere el vejete?¿Es un movimiento que se propaga en un fluido?, ¿una curva flexible?, ¿una moda?, ¿una tendencia o todas las anteriores? Para nosotros, “La Onda” es un showroom ubicado en el primer piso de Tacuba 87, donde los centrícolas amantes del vintage, pin up y rockabilly han encontrado un espacio alternativo de convivencia y centro de provisiones para seguir con su estilo de vida que trata de emular las modas de las décadas de los 40 y 50 del siglo pasado.

“La idea de La Onda nació de la necesidad que teníamos mi novia, mi cuñado Elliot, Pam, su novia y yo, de encontrar un lugar aquí en el Centro, donde vivimos, para crear un espacio en el que pudiéramos compartir nuestro gusto por el retro vintage, los coches, música, motos, ropa, bicicletas, accesorios, muebles, atomic, etc.

“En La Onda todo es atemporal, muy clásico.Viviendo en un mundo desechable, cosa que nosotros odiamos profundamente, teníamos la necesidad de dar una mirada al pasado”

“En La Onda todo es atemporal, muy clásico. Viviendo en un mundo desechable, cosa que nosotros odiamos profundamente, teníamos la necesidad de dar una mirada al pasado”, comenta Reno Casasola, uno de los fundadores y creadores de La Onda, mientras me muestra una rockola de 1951: “Los artículos están muy bien hechos. Mira, ésta (rockola) hasta la fecha todavía sirve y seguirá después de nosotros”.

Chico italiano viene al DF

A pesar de que muchos de los clientes habituales de este establecimiento se refieren a Reno como “el gringo”, por su acento extraño, en realidad es un veneciano de nacimiento, ciudadano del mundo por vocación, cuyo amor por el vintage lo trajo un día a nuestro país.

“Llegué a México de forma casual. Viví en Holanda, luego en África en los 90 unos años, me regresé a Europa y fue un shock. Yo ya quería salirme de Europa: me encantaban los coches y motos y quise buscar la forma de vivir de eso, cosa que no es fácil. Aparte no hay muchos lugares donde puedas rescatar cosas para salvarlas y venderlas. Fue un sueño muy difícil de cumplir. Y desde Holanda, un amigo que restauraba me mencionó un lote de motos de la Policía de Tránsito del Distrito Federal. No sé cómo supo, ¡no tengo la menor idea!

“Vine una semana, luego dos, luego tres, un mes, un poco más y los últimos años he pasado la mayoría de mi vida en México, lo cual agradezco mucho porque me hizo cumplir mi sueño”.

Así fue ese primer acercamiento con nuestro país, aprendió español, consiguió una novia y ahora tiene un negocio que sigue creciendo.78528

Onda en expansión

Lo que comenzó dentro de las paredes de un pequeño despacho del Centro Histórico atendido por un hippie, ahora ha salido por la puerta para darle un espacio definido a cada una de las partes que componen La Onda.

“Se encuentra la boutique en donde tenemos ropa inspirada en los años 40 y 50, un poco de los 60, accesorios retro vintage. A veces encontramos cosas de diseñadores de ese tiempo, sobre todo italianos. También hacemos colaboraciones con artesanos mexicanos, generamos piezas que van de la artesanía a cosas más customizadas”, explica Bianca StephanyGonzález, creadora de la tienda y de las marcas Lady Look y Bianca Look. Para este fin, Bianca se ha dado a la tarea de recuperar moldes antiguos para poder hacer los vestidos, zapatos y accesorios.

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Otro de los espacios fundamentales de La Onda es la barbería, que hace menos de un mes aún se encontraba relegada dentro de la boutique pero que ahora goza de un espacio propio debido a la demanda. “No inventamos nada -afirma Reno-. Simplemente queremos rescatar la tradición de las barberías de antaño, pero tenemos una ventaja: nosotros tenemos una visión muy global. Nosotros no queremos apartar la vista de la época. Primero vemos la tradición, contemplamos lo que era y nos adecuamos con productos modernos para tener una flexibilidad de vivir esto”.

“Nosotros no queremos apartar la vista de la época. Primero vemos la tradición, contemplamos lo que era y nos adecuamos con productos modernos para tener una flexibilidad de vivir esto”

¿Cuál es la importancia de tener una barbería en un mundo en el que sólo tienes 5 minutos para acicalarte antes de salir corriendo al trabajo? “Un buen corte, un buen cuidado de la barba y el bigote es higiénico, es bello, erótico; es parte de la personalidad de un hombre. Es limpio. Son cosas que realmente dan gusto a un hombre. Como tomar un whisky, un café, un buen viaje. Estos valores son destinados a quedarse sin duda. Nos interesa quedarnos con este estilo de vida y hace falta más que se viva en esta forma”.

Por último, pero no menos importante, se encuentra el estudio de tatuajes “Money Talks” que funciona bajo la dirección de artista Elliot González, el cual también está a punto de mudarse a un espacio más adecuado, debido a la cantidad de gente que recibe.

Todos tienen onda

Debido a su éxito y a su diseño, muchos piensan que La Onda es un negocio viejo, pero en realidad tiene apenas año y medio (la nueva barbería sólo tiene 3 semanas). En este momento se encuentran en plena expansión y, para celebrar su recién adquirido patio, organizaron un bazar de amigos que se dedican a rescatar cosas, que quieren vender o intercambiar material relacionado no sólo con el Pin Up y el vintage, sino con géneros musicales que van del Dub, surf, cha-cha-cha y Rockabilly, hasta la escena lounge exótica.

El bazar está planeado para los últimos viernes de cada mes y la entrada es gratuita.

La Onda Showroom
Tacuba 87
Centro Histórico
Tel. 55101898

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