Kühl

Por: Lucía Mayoral

Sandra Vite nos presentó una colección de gran inspiración victoriana, transportándonos al siglo XIX, tanto en sus propuestas como en el ambiente que la múica le dio al desfile. Vimos muchos cortes simétricos,y una gran presencia delos colores, desde el azul cielo hasta un azul marino y verde. En ciertos abrigos pareciera que tuvo una influencia de los vestidos flamencos, combinando la época vitoriana con rasgos españoles. Sin embargo, (y por suerte) no faltó el factor “moderno”, que incorporaba incluyendo vestidos, minifaldas, y botines; pareciera que uno se encuentra en el espacio vistiendo alta costura.

IES Moda

Por: María Fernanda López

Los estudiantes de IES Moda nos presentaron una agresiva propuesta, oscura y con tintes industriales, que nos recordó mucho a “La chica del dragón tatuado”. Las telas predominantes fueron el algodón, el poliester, y el tejido de punto, usadas en colores negros y grises oscuros principalmente, dándole un toque gótico a la colección. Su poder de usabilidad fue muy poco, y la confección fue deficiente. Sin embargo, nos hizo participes del proceso de experimentación y descubrimiento de los estudiantes de moda.

Kitzia Mitre

Por: María Fernanda López

A estas alturas, podríamos decir que Kitzia Mitre es una de las diseñadoras más esperadas del IDM. Sin embargo, esta vez no sabemos decir si nos gustó o si nos aburrió. Por un lado, su colección, compuesta principalmente por vestidos de noche, nos sorprendió por su extensa gama de colores, que incluía plateado, negro, naranja, verde, entre otros. Su nivel de confección mejoró notablemente, y en general podemos decir que exhibió un producto de mejor calidad. Sin embargo, nos pareció muy aburrido el hecho de que todas sus prendas fueran hechas con satín. ¿Salida fácil, tal vez?

Michelle Torres

Por: María Fernanda López

Sin duda, una de las grandes sorpresas del evento fue Michelle. Recordando su colección pasada, en la que nos sorprendió con vestidos de lentejuelas y estampados que parecían una imitación barata de Emilio Pucci, no esperábamos mucho de ella. Sin embargo, esta temporada le dio un radical giro a su estilo, donde la estrella principal fueron los cristales de Swarovski, mismos que adornaron tanto los labios de las modelos como los cinturones de los vestidos. Sus prendas consistieron en vestidos circulares, y vestidos de noche. Puntos extra por haber pensado en ropa utilizable, más que exhibible.

Olmos y Flores

Por: María Fernanda López

Este dúo de diseñadores fue una de nuestras propuestas favoritas la temporada pasada. Sus diseños pueden ser muy exagerados, por sus colores y el tipo de patrones, pero su calidad es impecable. Esta vez no fue la excepción. Comenzaron mostrándonos una serie de ropa interior, camisetas ceñidas y trajes en color negro, con motivos de cruces, y accesorios en dorado. Nos gusta que mezclaron piezas utilizables con otras más fantasiosas, creando un look único, aunque sólo para audaces de la moda. Siguió una serie de trajes y ropa interior adornados con un patrón del espacio exterior, mostrando un concepto extraño, pero único en color. Es admirable el talento y la creatividad de estos chicos.

Cherry Project

Por: María Fernanda López

Cherry Project ha logrado posicionarse como una de las marcas mexicanas más reconocidas en el ámbito de la moda. Esta vez, como siempre, fuimos testigos del porqué. Su ropa no es sólo apta para personas comunes, sino que presenta un estilo femenino, con un toque de lujo y diversión. Sus vestidos con pedrería en la parte de arriba nos parecieron unas de las propuestas más exquisitas de la noche. ¿Lo malo? Casi todas las prendas eran iguales, convirtiendo el último show de la noche en algo monótono.