El centro de acopio del Estadio Olímpico Universitario, de la UNAM, ha registrado algunos problemas en la clasificación y distribución de los víveres, luego de haber sido tomado por algunos voluntarios, quienes señalaron falta de transparencia en el traslado de las donaciones.

En un comunicado, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) informó que la noche del 26 de septiembre «un grupo de personas se sumó a las labores de acopio y clasificación que decenas de voluntarios venían realizando de días atrás. Horas después, ese grupo simuló llevar a cabo una asamblea en el interior del estadio, en la que determinó que nuestro personal abandonara el recinto, argumentando falta de transparencia».

Hasta el momento, la UNAM no ha dado a conocer más detalles sobre el grupo que increpó las actividades en el centro de acopio del Estadio Olímpico; sin embargo, indicó que «no está en condiciones de supervisar, a partir de ahora, el destino que tengan los bienes y suministros provenientes de la sociedad».

En tanto, algunos centros de acopio, como el instalado en la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia, permanecerán abiertos hasta este viernes 29 de septiembre. También continuará recibiendo ayuda la Facultad de Artes y Diseño, entre otras instalaciones que pueden consultarse en la página de internet de la UNAM.

La máxima casa de estudios precisó que en el Estadio Olímpico Universitario recibieron alrededor de 900 toneladas de ayuda,  que se clasificaron y canalizaron a las poblaciones más necesitadas de Morelos, Puebla, Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Estado de México y a 23 sitios de la Ciudad de México.

Desde el lunes 25 de septiembre, la Universidad informó que, pese al regreso a clases, daría continuidad a las brigadas emergentes de alumnos y profesores, y a los mecanismos de ayuda que siguen brindando los miembros de la comunidad universitaria en distintos ámbitos.

«La Universidad de la Nación reconoce la fuerza y el entusiasmo de quienes han participado incondicionalmente en las labores de ayuda, de  apoyo psicológico, de acciones sociales, médicas y sanitarias; de asistencia jurídica; de formación de cuadrillas revisoras de inmuebles dañados y de actividades culturales en albergues e instalaciones», precisó la institución mediante un comunicado.