Si pensabas que Lady Pioja iba a ser lo peor que vas a ver en el próximo mundial, estás en un error. Comienzan esas semanas en las que -te guste o no el fucho- lo tendrás hasta en la sopa. Los taxistas no hablarán de otra cosa, las televisiones de los puestos callejeros tendrán los ojos de miles de curiosos que verán cómo México va a perde… perdón… va a ganar; la ciudad se paralizará cuando juegue contra Brasil. La pregunta más común va a ser “¿Y usté cómo ve a México? ¿Cree que pierda?” porque eso sí, todos vamos a ser expertos.

En Chilango amamos (casi todos) el deporte de las patadas. Pero sabemos que este mes también te vas a topar a ciertos personajazos pamboleros que no van a desperdiciar oportunidad para lucirse mientras esté la Copa del Mundo.

¡Que se arme la quiniela!

Hacer la quiniela requiere planeación y una habilidad innata en matemáticas y estadísticas que no todos tenemos. Además requiere un cálculo desarrollado de probabilidades y estadísticas. Pero afortunadamente todos tenemos un compañero en el trabajo que arma la quiniela y, en el momento que leas esto, ya la tiene preparada en excel; plus, siempre es el que junta el dinero, te convence de que apuestes por Bosnia aunque al final se queda con la lana de todos. Pero ¡vamos! ¡es divertido apostar! ¡Vamos Argelia!

Un director técnico en cada hijo te dio

“El ‘Piojo’ es un tonto”. “Hubiera llamado a Cuauhtémoc”. “No hace los cambios cuando debe” ¡Seguro en tu oficina hay un director técnico en potencia! Es el clásico que se la pasa criticando el desempeño de la selección y ¡ay de ellos si pierden! porque se pone rojo y se le salta la vena. Este personaje se la pasa toda la semana haciendo su alineación ideal, buscando las mejores combinaciones y se va a enojar si el “Piojo” Herrera no le hace caso (suponemos que le pasa sus tips telepáticamente). Lo más patético es que cuando México gana un partido dice “¿Ya ven? ¡es lo que yo había propuesto!”

¡Vámonos a la cantina!

Siempre hay un compañero al que se le queman las habas por ver los partidos del mundial: hasta le da la temblorina cuando México va a jugar pensando días antes cómo lo van a ver. Le da igual: la cantina, la fonda de la esquina, el puesto de tacos. Sabemos que tú también mueres por verlo pero él no: convence al jefe de que todos se vayan a la cantina de la esquina. Ni te quejes, deja que él organice, total, una ida a la cantina no le hace mal a nadie.

Look futbolero

Oiga usted, la elegancia de la oficina: playera de la selección con pantalón de casimir y saco. La compañera que viste playera ajustada con tacones. Los nostálgicos que usan la playera de Palencia, los que se ponen su cinta de Luis Hernández en la frente. Y también están los extranjeros que se pondrán sus respectivas playeras ¡cómo ño!. Los días que jugará la Selección Nacional la oficina se convertirá en la pasarela de la moda deportiva-formal-casual.

¡Odio el fut!

Bueno, hay quien no le gusta el futbol. Eso se respeta. Lo malo es que lo dicen todo el tiempo como si todos los demás fuéramos cavenícolas. “No sé qué le ven a ese deporte, son 22 monos tras un balón” y se quedan en su lugar haciendo reportes mientras los demás están en la sala de juntas coreando goles. Relájense: por lo menos deberían ver al mundial como una oportunidad para echar la flojera durante 90 minutos.

¡Viva el mundial!