Por Alejandro Alemán

Para

finales de los años ochenta, la escena musical en México era

completamente diferente a lo que conocemos hoy en día: los conciertos

masivos no existían, era raro escuchar grupos de rock mexicano en la

radio y la televisión era vista con recelo por estos nuevos grupos que

se sentían cómodos viviendo en el underground donde habían nacido.

Uno

de los grupos que empezó a romper esos atavismos fue Café Tacvba,

quienes -siguiendo el ejemplo de su referente histórico inmediato,

Botellita de Jerez- salieron de su zona de confort para presentarse en

foros cada vez más grandes, incluso aceptando invitaciones a programas

de la televisora de San Ángel. Hablar de Café Tacvba es, en buena

medida, hablar de una parte fundamental de la historia del rock

mexicano.

Sin

embargo, Seguir Siendo, el documental que celebra los veinte años de

existencia del grupo, deja poco a la historia y se entrega por completo

al registro "tras bambalinas" del grupo. Es un documental hecho por fans

para fans.

El

inicio no puede ser más excepcional: las imágenes de la banda en el

famoso programa de Paco Stanley. El momento es revelador: cuatro jóvenes

(muy jóvenes) nerviosos, vestidos de forma estrafalaria, entregados por

completo al folclorismo y muy tímidos (lo tímido, por cierto, nunca se

les quitaría); la imagen sirve de testimonio para comprobar cuánto han

cambiado y cuánto hemos cambiado nosotros mismos a través de su música.

La

revisión histórica de ese cambio y su contexto dentro de la escena

musical mexicana es en lo que menos repara este documental dirigido por

Ernesto Contreras (Párpados Azules, 2007) y José Manuel Cravioto (Los

últimos héroes de la península, 2008), quienes rumbo al minuto treinta

de la cinta ya han agotado la revisión de todos los álbumes del grupo

para entregarse por completo al seguimiento de sus giras más recientes

(Japón la más interesante), al registro de sus conciertos de

aniversario, y en mostrarnos entrevistas -muchas de ellas prescindibles-

con diferentes personajes ligados a la música (en su mayoría

productores) quienes no tienen empacho en comparar a Tacvba con los

Beatles.

Esperen,

eso sí, mucho material tras bambalinas: cómo se van de gira, cómo

duermen, los momentos previos en el camerino, las terribles -por

aburridas- sesiones de preguntas con la prensa así como los ensayos y

algunos momentos del proceso de composición.

Pero

todas esas imágenes, que dejarán satisfechos a la gran mayoría de los

fans, no son suficientes para los que además busquen una exploración en

el fenómeno de "Café Tacvba". Es sorprendente que teniendo tanto

material de archivo disponible, el documental decida mejor contarnos la

historia reciente (conocida por la mayoría) que la génesis del grupo, su

evolución y su exploración constante de nuevos ritmos y formas de hacer

música.

Como

bien lo indica el título, este documental se preocupa más por la etapa

de "Seguir siendo", que por la de "cómo fuimos", "como cambiamos", "cómo

evolucionamos".

Al

final tampoco importará tanto, los fans lo disfrutaran mucho y quienes

queramos revisar la historia, lo mejor que podemos hacer es ponerse a

escuchar sus discos y corear sus rolas. Paparapapa eo eo.