Jonathan Demme, el director de El silencio de los inocentes, murió hoy en su departamento en Manhattan a los 73 años.

«Puedo confirmar que Jonathan falleció temprano esta mañana en su apartamento en Manhattan, rodeado de su esposa, Joanne Howard, y tres hijos», dijo su portavoz en un breve comunicado.

Según el boletín, murió de complicaciones por cáncer de esófago. Dejó a sus hijos Ramona, de 29 años, y su esposo James Molloy; Brooklyn, de 26 años, y Jos, de 21 años.

Demme se llevó un Oscar a mejor director por la película que protagonizan Anthony Hopkins y Jodie Foster.

En sus créditos también figura Philadelphia (1993), que también fue aclamada y recibió el Oscar a mejor actor para Tom Hanks, su protagonista, que encarna a un abogado que lucha por hacer justicia después de contraer el VIH.

También realizó series de televisión y videos musicales.