Por Ira Franco

Si puedes creerte que después de cinco intentos fallidos para llegar a Estados Unidos, un migrante mexicano reúne el dinero para volar hasta a Alemania para buscar trabajo, entonces la historia te parecerá fresca y divertida, una especie de fairytale del migrante.

Escrita y dirigida por Jorge Ramírez-Suárez, está bien contada, aunque también cuesta tragarse que en la realidad un adolescente de Durango (Krystian Ferrer) tenga tanta química con una anciana alemana (Ingeborg Schöner). Recomendable para un domingo.