Por Héctor Cruz

En el cine mexicano todo mundo quiere hacer la gran película cómica. Ésa que rompa los récords de taquilla y que les deje ganancias millonarias. El éxito de Nosotros los Nobles es un caso aislado que supo conjuntar una historia fresca (no sin sus inconsistencias en el guión), con buenas actuaciones y mucha fortuna, pero que a grandes rasgos les funcionó muy bien.

Caso contrario es el de El Crimen del Cácaro Gumaro, tercer largometraje de Emilio Portes (Pastorela, Conozca la Cabeza de Juan Pérez), cuya historia es muy simple: trata de la pelea entre sí de dos hermanos (Archimboldo y Gumaro) por tratar de conservar la herencia que su padre (Don Toribio) le dejó a cada uno, la casa familiar y el cine del pueblo, respectivamente. Todo lo demás es una trama al estilo el Correcaminos y el Coyote o Pedro Infante (con todo y bigotito) y Luis Aguilar,llena de absurdos, ridiculeces, referencias obvias, y humor simplón, que tiene como réferi a Don Cuino (Andrés Bustamante), político corrupto y nada chistoso.

La película es lineal, cronológica y predecible. Con efectos especiales como de cinta de El Santo. Inicia con un “guiño” a Amores Perros, pero después todo se basa en parodias a otras cintas mexicanas y cine clásico, a videos virales de las redes sociales (El Canaca y me amarraron como puerco, el celular que revienta maíz palomero y un sin fin de chistes que todo mundo se sabe y que han colmado hasta el hartazgo el timeline de su Facebook y Twitter) y todo se les va de las manos. Todo en exceso es malo y esta cinta está llena de eso. Zombis, referencias al cine clásico y de autor, chistes de programa de comedia del Canal 2

Ana de la Reguera, sobreactuada. Lo suyo no es la comedia. Un Jesús Ochoa que más que un personaje parece estar actuando de sí mismo. Y hasta un crítico de cine con apellido de ex presidente haciéndola de actor contra Chabelo. Sí, contra el amigo de todos los niños. La cinta es una pasarela de actores que dieron forma a muchas de las peores cintas mexicanas de la historia: Alfonso Zayas, Carmen Salinas, Jorge Rivero, Alberto Rojas “El Caballo”. También están Freddy y Germán Ortega, Jis y Trino ¿necesitan más? Una cinta sin gloria y con mucha pena ajena.