–PorOswaldo Betancourt L.@rockswaldo

No es novedad que las películas animadas de DC sean buenas, especialmente las de Batman, lo sorprendente en esta ocasión fue que llegara a las salas. Además, es la primera historia del caballero de la noche que llega al cine con clasificación R (para adultos).

La trama se basa en el cómic clásico escrito por Alan Moore e ilustrado por Brian Bolland y la respeta en gran parte, Batman va a ver al Joker para tratar de disuadirlo de su eterno conflicto, el Príncipe payaso del crimen tiene otros planes, quiere probar que todos se pueden convertir en alguien como él si tienen un mal día, y para eso usará al comisionado Gordon y a su hija, Bárbara.

En este sentido el argumento mantiene su fuerza, el conflicto moral y hasta filosófico de las posturas de ambos es lo importante, no tanto la acción. La animación no está mal, es sencilla, pero los dibujos quedan a deber un poco a lado de las páginas del cómic.

Como en cualquier paso de las viñetas a la pantalla grande se pierden cosas, o también puede suceder lo contrario. Brian Azzarello, guionista de la película y también escritor de cómics, decidió añadir una parte centrada en la Batichica, la cual ha disgustado a gran parte de la audiencia por no “respetar” la historia original. La razón puede ser que en THe Killing Joke no hay suficiente material para un largometraje, de hecho la precuela se lleva casi media hora de los 75 minutos de duración y ni así termina de acoplarse por completo pero funciona; parece que su fin también era involucrar más a Batman (hay una escena donde tiene relaciones) y darle un mayor papel a ella (en el cómic sólo aparece como Bárbara, no como la heroína).

Mark Hamill (sí, Luke Skywalker) vuelve a darle voz al Guasón, sin duda alguna su trabajo es excepcional, y la canción es perfecta, al igual que el resto de la música. En general vale la pena.

SPOILER:

El final puede sacar de onda si no has leído el cómic (o incluso la primera vez que lo lees), termina de manera abrupta y parece no tener sentido, pero en pocas palabras su importancia radica en terminar este diálogo sobre la locura de los personajes con un chiste que también habla sobre esto, es algo inusual en cualquier arco de Batman.