Al final de de Episodio IV,
George Lucas terminóexhausto. Cuando se dio luz verde al proyecto de
filmar la secuela de Star Wars, Lucas tomó la sabia decisión de
contratar a un
director para que hiciera el trabajo. Y fue una decisión inteligente
porque,
hay que decirlo, George no es precisamente un buen director, para prueba
ahí
están las malditas precuelas, una más asquerosa que la anterior.

El elegido fue Irvin Kershner; director
multifacético que inició su carrera haciendo documentales y que recibió
la
llamada de George Lucas justo cuando comenzaba a realizar películas en
Hollywood. Esa mezcla entre independencia y conocimiento del sistema fue
lo que
llamó la atención de George. Sin embargo, Kershner declinó la oferta.
¿Qué
quieres para hacer la película?, le preguntó Lucas, a lo que Kershner
contestó:
"Quiero hacerla solo". Así George cedió el control creativo de su obra a
cambio
de un nuevo director.

Kershner dirigióEmpire Strikes Back
con la visión de un autor (involucrándose incluso en cambios en el
guión) y no
como un vil director a sueldo. Lucas hizo grande a Star Wars pero
Kershner, con
su Episodio V, la hizo legendaria.

Dato Curioso: Kershner fue maestro de George Lucas "No tenía
buen ojo de director, pero si mucha visión".