Por fin se estrenó Intensa-mente, una de las animaciones más esperadas de esta temporada. Como en la película, hay pequeños momentos de la vida cotidiana en chilangolandia que nos ponen a flor de piel las siguientes emociones.

Enojo

  1. Vas en el micro y haces tu parada con tiempo sólo para bajarte una cuadra, o más, después.
  2. Cuando la lluvia se suelta con ganas y te pones atlético para evitar los salpicones de los charcos, saltas, esperas que pasen los coches o ya de plano le corres, pero no falta el gandalla que hasta le acelera para empaparte todo.
  3. Cuando pides una orden de tacos de pastor y no les ponen piña.

Disgusto

  1. Estás a punto de saborear ese manjar callejero y de repente ves pasar una alimaña al derredor del puesto.
  2. Cuando vas en el micro, o en el metro, y ves cómo alguien que se estaba hurgando la nariz embarra con el dedouna sustancia rara en el tubo.
  3. Caer en un bache en medio de Constituyentes, o cualquier avenida de ese tipo.

Tristeza

  1. Ese momento frustrante en que corres para alcanzar el metro y las puertas se cierran en tu cara.
  2. El tráfico está a vuelta de rueda y por querer dártelas de ruletero tomas un atajo que te hace llegar más tarde a tu destino.
  3. Que no empieces el día con un desayuno de campeones porque ya no hay tortas de tamal en tu puesto de confianza.

Miedo

  1. Cuando se te olvida decirle al taxista tu ruta e inesperadamente se va por otro lado.
  2. Estás muy metido en la plática, fiesta o lo que sea y entonces te das cuenta de que el tiempo del parquímetro está por terminarse, dejaste el coche lejos y como ya andas medio persa, no te acuerdas donde lo dejaste. ¡A correr!
  3. Después de que te dejaste llevar por la fiesta y es hora de pedir la cuenta; lo peor, varios de tus “amigos” se fueron sin pagar.

Alegría

  1. Ser el último coche que pasa en una calle antes de que la cierren por una manifestación.
  2. Disfrutar la facilidad para llegar de un lado a otro en la capirucha durante los puentes y vacaciones.
  3. Despertar con la ciudad tan despejada que se ven los volcanes sin problemas.

¿Qué otros momentos o emociones te despierta vivir en la ciudad?