Ni un seductor espía ni un héroe cargado de testosterona nos harán recuperar la experiencia de asistir a una sala de cine: esa misión es de la Mujer Maravilla.

No es fácil encontrar un ambiente de fraternidad y concordia entre los miembros de un reparto al filmar una película de superhéroes; como ejemplo basta mencionar los conflictos mediáticos sucedidos durante el rodaje de La Liga de la Justicia. Pero tampoco es utópico.

Patty Jenkins, directora de Wonder Woman 1984, considera esta experiencia como una especie de “reunión de la prepa”, en gran medida gracias al liderazgo de Gal Gadot, estrella israelí adoptada por Hollywood, con quien platicamos sobre el estreno de la ambiciosa secuela en medio de una contingencia mundial.

¿Cómo resultó esta experiencia al sumarse actores como Kristen Wiig y Pedro Pascal?

Con Kristen simplemente fue amor a primera vista. La idea de incluirla en este reparto fue de Patty y justo ahí corroboré su maravillosa visión como directora. Pedro es uno de los mejores intérpretes que están trabajando ahora en Hollywood. Formamos una gran familia que incluso nos hizo olvidar lo bien que la pasamos cuando rodamos la primera cinta.

¿Quieren los productores separar esta cinta de la primera, como historia independiente?

No lo niego. Se trata de una segunda parte que nos presenta a Diana Prince en Washington a mediados de la década de los 80. Ahí conoce a una compañera de trabajo, Barbara (Kristen Wiig), y se convierten en mejores amigas. Algunas cosas, sin embargo, transformarán este vínculo de lealtad en una rivalidad con La Mujer Maravilla.

mujer maravilla
Cortesía

La Mujer Maravilla puede ser una alegoría del arrojo de las mujeres en sus vidas cotidianas. ¿Qué te inspira a ser valiente?

Definitivamente mis ambiciones y mis propósitos como artista, que básicamente tienen que ver con salir de mi zona de confort. Como actriz busco desafíos constantemente y esa situación me exige encontrar en mi personalidad un coraje que en algunas ocasiones desconozco.

Es curioso que la historia se desarrolle en los 80, un periodo en el que las mujeres inteligentes tenían que esconderse en un vestuario espacioso para ocultar su cuerpo.

Es algo en lo que mi compañía productora y yo estamos trabajando. Espero rodar próximamente la vida de Hedy Lamarr, considerada una de las más bellas actrices fotografiadas en el cine, y que fue una mujer muy inteligente. Se le considera la madre de lo que hoy en día conocemos como comunicación digital. Sin embargo, tal parece que Hedy no podía ser las dos cosas: una hermosa mujer y una persona sumamente capaz e ingeniosa. Todavía queda camino por recorrer.

¿En qué periodo te gustaría relocalizar a la Mujer Maravilla en la próxima película?

Tengo conocimiento de que Patty está eligiendo precisamente la era de la próxima aventura. ¿Por qué no hoy en día? Creo que 2020 puede ofrecer un marco muy interesante para nuestra siguiente historia.

WONDER WOMAN 1984, EN SALAS, DICIEMBRE 17