Ser la revista guía número uno de la ciudad nos ha permitido ver todo tipo de cosas. Desde espacios que nos roban el aliento por su creativo concepto, hasta otros que nos roban las ganas de reseñar debido a su pésimo servicio.

Queremos que nuestros conocimientos en el área restaurantera y vida nocturna les sirvan a ustedes, lectores, para que puedan elegir espacios de calidad, que ofrezcan variedad, pero sobre todo, lugares donde cada peso que gasten valga la pena.

Esta nota va dirigida, también, a todos los que inician un negocio con mucho esfuerzo y que, por falta de experiencia en el campo corren el riesgo de tronar. Mejor prevenir, ¿cómo?, sabiendo qué se necesita para tener un lugar pegador y de calidad. Hay detalles pequeños pero muy importantes. Se los rebelamos. Lo importante es no olvidar que el cliente siempre tiene la razón.

1- Tiene que tener un concepto

Ir a un lugar que no propone nada es muy aburrido. No queremos que sea un concepto ultra original, puede ser algo clásico o sencillo, lo importante es que sepan qué ofrecen y cómo lo ofrecen. Los bares y restaurantes más pegadores son aquellos que mantienen una línea bien trazada, conservan sus precios, estilo y, sobre todo, un tipo de público específico.

2- La selección musical

Siempre será mejor un bar con un dj profesional que uno que improvisa con música del radio de fondo. Poner una lista de reproducción del 2005 habla pésimo de un lugar.
Otro problema recurrente es tener bocinas tronadas. Inviertan en un buen sonido, eso les puede jalar mucho público.

3- Si no hay trago especialidad es que…

Si el lugar al que van cuenta con un trago especialidad habla muy bien de su coctelería. Quiere decir que cuentan con mixólogos que diseñaron la carta de bebidas; gente especializada en el tema. Si no tienen uno es un signo evidente de que no hubo ningún esfuerzo a la hora de crear la carta. Lo más seguro es que sus bebidas sean muy malas.

4- Reducir porciones = suicidio

Dueños de bares, antros y restaurantes, si quieren que su lugar truene es muy fácil, sólo reduzcan porciones y mantengan el mismo precio. No pueden pretender cobrar lo mismo y dar menos, mucho menos a sus clientes recurrentes. Y ustedes clientes no vuelvan si notan algo así.

5- El servicio jamás debe contestar “no sé” o “no se puede”

El personal preparado se nota a kilómetros de distancia y tener gente capaz puede ser el éxito de un lugar. Nadie quiere gastar en algo que no le gusta del todo. Así que dueños, denle la vuelta a cualquier petición de un cliente, hacer esto puede lograr su fidelidad por siempre: si no hay arándanos, ofrezcan ciruelas. Así funciona. Eliminen de su vocabulario el “no sé” y el “no se puede”.

6- Meter la propina como “sugerida” resulta muy ofensivo

No hay nada más ofensivo como cliente que un bar quiera verte la cara o abusar de tu borrachez para cobrarte de más. No pueden hacer eso. Podrán caer dos que tres en el engaño, pero si dos lo notan, les harán pésima fama. No permitan que les metan un 20% de propina obligatoria. En México no es un deber poner esa cantidad.

7- Los tiempos en la ciudad son muy importantes

Los chilangos somos muy desesperados, no sabemos esperar, nos gusta todo rápido y al instante. Así que la clave de un lugar con éxito es atender de manera eficaz a quienes lo visitan.
No traigan una cuba y media hora después traigan los limones. Hay que poner atención a esos detalles. Analicen qué podría necesitar el cliente antes de que lo pida. Si quieren un vaso lleno de hielos no se les vaya ocurrir traer un vaso con un hielo. Sean espléndidos.

8- Hay que respetar el último chorrito

Es odioso tener el último chorrito de una bebida y que se la lleven los meseros sin preguntar. A nadie le gusta y hay personas que reaccionan muy violento a esta situación. Dueños: díganle al personal de servicio que siempre pregunte. Clientes: digan que no les parece y pidan una reposición.

9- Querer ahorrar dinero y no poner aire acondicionado es retrógrada

La gente paga por divertirse. No pueden tenerla sin aire, sudando y pasando calor. Eso habla muy mal del lugar. Tener una buena ventilación es algo que la gente agradece, no crean que pasa desapercibido este detalle. Y ustedes clientes, en son de huelga no vuelvan a un espacio que los tiene sudando la gota gorda. La mejor forma de exigir es dejando de consumir.

10- Los R.P. pueden destruir un lugar

Dueños: Tengan mucho cuidado al elegir quién lleva las relaciones públicas de su lugar. Casi todos tienden a contratar mirreyes que dan una pésima imagen. Es mejor buscar alguien más sencillo y servicial, que dé la razón a los clientes.

Clientes: No manejen sus quejas o sugerencias con un rp, mejor busquen al gerente. Un magnífico lugar es atendido por el dueño (o por lo menos es vigilado). Quien tiene tienda, que la atienda.