ORBE en el MUCA Roma

Género
Videoarte, Instalaciones, Fotografía, Multimedia

Crítica Chilango

Orbe se vende como una muestra multidisciplinaria. Sin embargo, más allá de la instalación ocasional y algunas intervenciones en las paredes, hablamos de una exposición fundamentalmente fotográfica. Esto, claro, lejos está de ser un problema.

Los artistas participantes, la japonesa Miho Hagino, la alemana Susanne Schuricht y los mexicanos Lauro López y Juan Antonio Sánchez Rull, comulgan bien en términos estilísticos y amenizan también con ideas afines: la ciudad contemporánea es un espacio reservado para la intimidad, la comunidad, lo compartido. Sus frías edificaciones, la monotonía de su vida laboral y las desigualdades de sus desarrollos económicos la han convertido en un personaje por si mismo.

No es casualidad que la figura humana no aparezca en toda la muestra. Imágenes nítidas y elegantes de frentes de edificios, de luces nocturnas, de algunas construcciones antiguas y abandonadas por la modernidad, adornan las salas de una forma magistral dadas las limitaciones espaciales del MUCA Roma. Hay hasta una maqueta monumental.

Así, Orbe defiende por sus principios estéticos un tema quizá trillado. No muestra "realidades urbanas" sino la realidad propia de la ciudad; por esta característica sutilísima y rescatable, es que vale mucho la pena visitarla.