Hola, soy millennial y voy a ser papá

15 de abril de 2016

A lo mejor ya es cliché que cada cambio de generación decimos “los padres y los hijos ya no son como antes, en mis tiempos... bla, bla, bla”. Yo creo que sí, siempre se recibirán señalamientos de las otras generaciones y tendremos que aceptarlo, algún día nosotros lo diremos.

Ser un padre millennial no es cosa fácil: vivimos en el ojo del huracán desde que implementamos los nuevos métodos de empleo y estatus de “siempre disponible”, ya sea para nuestros jefes, amigos, familia, pareja y ahora hijos, todo gracias a nuestro más intimo compañero –hasta más que el cepillo de dientes-, el smartphone.

Según un estudio presentado por Crowtap, en la próxima década se espera que el 80% de los millennials se conviertan en papás. Algunos ya se nos adelantaron pero aún así hemos registrado la tasa de embarazo de mayor edad en la historia: 26 años.

Se dice que los hogares dirigidos por millennials están dejando las dictaduras, que ahora la educación es mucho más democrática, se tiene una mente más abierta, somos más empáticos y cuestionadores con nuestros hijos y sus actividades, ya no nos interesan los logros o premios, sino el acompañamiento en el día a día.

Según el estudio Millennials Reset Generation arrojado por Media Brands y Interpublic Group, éstas son algunas características de los padres Millennials:

Mamás Millennials

-       Ésta es la generación de madres latinas con mayor nivel educativo y 30%  tiene pensado comenzar su propio negocio.

-       El 42% afirma que el dinero es un tema importante pero no como status, sino por oportunidades, ya que quieren darle actividades divertidas a sus hijos y la mejor educación.

-       Consideran las redes sociales como un espacio intimo, ya que comparten las primeras fotos y experiencias de sus hijos en tiempo real.

-       Piden que las marcas muestren a mamás reales, que sus productos sean útiles y buenos.

Papás Millennials

-       El 70% tiene más opciones sobre cómo vivir la vida y tiene una mayor tendencia a creer que las mujeres cuentan con las mismas oportunidades que ellos.

-       Buscan mayor información sobre lo que van a comprar a diferencia de la generación de sus padres y abuelos.

-       Son mucho más concientes del entorno social y les gusta relacionarse con marcas que realicen donaciones a buenas causas.

-       Normalmente tienen más dispositivos que las mamás pero no exponen tanto en redes sociales su vida paternal.

Lo bueno y no tan bueno de tener padres millennials

Lo bueno

-       La memoria de los niños ya no es tan a corto plazo, tiene oportunidad de revivir experiencias y momentos frecuentemente en las fotos y videos que les toman sus papás.

-       Se dice que los millennials tienen una mejor conectividad con sus hijos, no le tienen miedo a la tecnología y confían en los contenidos, ya que los investigan y comentan con ellos.

-       Crean canales de comunicación donde sus hijos se sienten cómodos, ya que están al tanto e involucrados en sus gustos.

-       La mayoría de los padres millennials afirma que su principal fuente de información y consejo siempre serán las abuelitas, pero en segundo lugar vienen los blogs, redes sociales y páginas web.

Lo no tan bueno

-       Los dispositivos no son las nuevas niñeras, hay que fomentar actividades al aire libre, con otro tipo de juguetes y no dejar fuera los abrazos.

-       No confiemos en los filtros de Internet: nuestros hijos nos superaráan, es ley de vida.

-       No fomentemos el uso de dispositivos a la hora de la comida, mata una convivencia familiar esencial y abusar de este método como distractor a la hora de comer hace que los niños no registren una actividad tan importante y que no asimilen de manera correcta los nutrientes.

Para esta generación, ser buen padre y madre es que los DOS estén presentes con su familia, lo cual hace la paternidad más igualitaria: ejemplo de esto es el millennial Mark Zuckerberg, CEO de Facebook, que tomó varios meses de paternidad cuando nació su primera hija.

Como todas las generaciones, los millennials tienen lo bueno, lo no tan bueno, y en lo que podemos chambearle, así que si eres un millennial comprometido sabemos que lograrás el balance. 

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