Aquí hay que pedir lo clásico: caldo de camarón, taquitos o algo enchilado a la diabla.

Es una buena opción para grupos de trabajo, sobre todo quienes tienen su oficina cerca, y para jóvenes que quieren ligar. Quien busca un restaurante tranquilo, íntimo, saldrá huyendo.

La carta está tan amplia y tiene tanta variedad que te puedes perder un poco. Encuentras todos los mariscos preparados de miles de formas distintas. ¡En total son 210 platillos del mar!

El popcorn de jaiba es muy rico. Las jaibas empanizados con perejil son tiernas y la salsa de mayonesa con chipotle que los acompaña realza muy bien su sabor. Eso sí: las papas fritas no presentan ningún interés, son gruesas y grasosas.