Vidrios emplomados en la entrada con puertas de “saloon”. Plantas artificiales sobre una barra iluminada que arroja hacia el cielo una discreta luz verde y morada. Vitral de mariposas en el techo, mesas hexagonales, piso beige, paredes verdes claras, dibujos de mujeres pintados al pastel. Baño súper limpio.

El mismo que está en la barra es el que meserea y la dueña está sentada en el centro de todo vigilado el movimiento. Esta pequeña cantina es frecuentada por gente de la zona y con su decoración hogareña se siente como si bebieras, si no en tu casa, en casa de alguien más.