Ahhh, la tristeza. ¡Y qué tamaño de tristeza! Damien Rice se metió en el corazón de todos con ésta y al parecer es la única forma en la que logrará mantenerse ahí. Sus demás rolas en una suerte de Alejandro Filio primermundista, no han trascendido a las masas. Pero esta es pop, y del bueno y pegador.