¿Por qué ahí?

Porque también queremos demostrarle lo rudos que somos. “Mira, te voy a llevar al barrio más bravo de la ciudad, donde vas a encontrar cosas que ni te imaginas”. Acto seguido: lo llevas a una zona insalubre y peligrosa. Qué buena forma de tratar a los extranjeros, weeee.

¿Y de veras les gusta?

¡Obvio no! ¿O a ti te gustaría que te llevaran a la versión, digamos, afgana de Tepito? No, ¿verdad? ¿Te gustaría sentirte temeroso y un poquito sucio? No, ¿verdad? Mal amigo.

¿Podemos esforzarnos un poquito más?

Claro. Es más, si lo que quieres es de veras turismo extremo, llévalo al tianguis del Salado en Iztapalapa. Eso sí es rudeza y no fregaderas.