Llega muy tranquilo y todo al trabajo, y luego toma tu cartera y di que vas al banco a pagar tu tarjeta de crédito. Dos horas después llama “desde la delegación” diciendo que te asaltaron cuando ibas de camino y que presentaste una denuncia. Como te presentaste a trabajar correctamente, llevabas tu portafolio o computadora y no había sospecha de que harías algo así, nadie sospechará.

Claro, como es el mundial no faltarán los comentarios “sospechosistas”, pero tú resiste. Si quieres agregarle dramatismo al hecho, publícalo en Facebook, Twitter y llega al otro día con un ojo morado.