Por Baxter, que según las básculas de los centros comerciales, está 15 kilos arriba de su peso ideal.

En la gustadísima sección “seamos políticamente incorrectos” patrocinada por la Fundación Esteban Arce, examinaremos un tema importante, que nos marca desde los primeros años de nuestras vidas: la obesidad. La complexión física juega un papel importantísimo para nuestros roles sociales, nunca serán lo mismo la chica con cuerpo de Barbie que la que tiene la belleza escondida detrás de un par de gafas.

O en este caso, las personas que están en un peso más o menos proporcional a su altura, que una persona con un verdadero problema de obesidad. Como diría mi abuelita, “de todo hay en la viña del señor”. Como puede haber gorditos amables, adorables, también los hay odiosos.

No se trata de señalar defectos en el otro, tampoco de promover desórdenes alimenticios, todo lo que sigue a continuación, es una broma llevada al extremo.

Lo que sí, es que por diversas razones, los gordos… se agradecen.