¿Por qué era tan genial?

Las cachetadas eran esos dulces baratos sin marca siquiera, que consistían en una pasta azucarada embarrada en dos rectángulos de plástico. El truco estaba en quitarle los plásticos con un movimiento certero, para quedarse con el palito envuelto en la pasta azucarada. La opción tradicional era lamer el azúcar directamente del plástico, con lo cual surgió el nombre de cachetada, porque te dejaba todo el cachete embarrado.

¿Cuál es nuestra versión adulta?

Las cachetadas que recibimos por infidelidades. O la famosa cachetada con guante blanco, que nos aplican seguido en la chamba, los amigos o la pareja.

Nivel de diabetes

9.3