En el último año la fiebre por los servicios digitales que te ayudan a realizar quehaceres cotidianos explotó. A través de tu computadora o smartphonepuedes encontrar desde quien lave tu ropa hasta quien te lleve a tu trabajo, y ahora también, quien le de una buena boleada a tus zapatos. Su nombre es Bolero Lero.

Parece que no, pero para muchos es aún un acto de distinción el calzar los zapatos relucientes, con ese brillito que no se logra con las esponjitas del súper; ése que sólo los boleros profesionales pueden lograr. Ese brillito que descubrió Francisco Corral, cuando tras una boda, creyó que sus zapatos ya no se salvarían.

“Pensé que la mancha ya no iba a salir, pero los dejó como nuevos”, dice Francisco. “Ahí me quedó claro que hay boleros profesionales y que yo no sabía limpiar zapatos”.

Acto seguido, tuvo la idea para un negocio: Bolero Lero, boleros a domicilio.

La idea es: el usuario solicita al bolero a través de la página de internet de Bolero Lero; éste pasa por los papos a casa del cliente deben ser mínimo cuatro pares y sale de a 35 pesos el par– el bolero les echa grasa y se los deja listos para calzar. El pago puede ser con tarjetas de crédito, débito o bien en efectivo.

Tal vez suena a una idea que se le ocurriría a Javi Noble; sin embargo, además de ser un servicio, Bolero Lero representa un camino de ingresos extras y más estables para los más de 3,000 boleros profesionales que trabajan en la Ciudad de México. Unos 500 son ambulantes independientes y el resto forma parte del Asociación de Lustradores de Calzado, pero aún así, la mayor parte de ellos no cuenta con prestaciones, ni seguro social.

Boleros protegidos

Si bien para Francisco y sus socios éste un negocio, tiene también un componente social.

“Nos dimos cuenta también que había que meter una parte social a la empresa, darles mejores condiciones de trabajo; seguro social, por ejemplo”, dijo Francisco.

Un bolero normal, en un buen puesto, puede ganar 20 pesos por lavada al día, que es como 800 pesos semanales y 3,200 pesos mensuales, mientras que al estar en Bolero Lero, Francisco asegura que sus boleros ganan entre 250 o 300 pesos diarios, 1,500 y 1750 semanales y hasta 6,500 o 7,000 máximo al mes.

A la fecha, los boleros que trabajan con Bolero Lero visten igual: con un mandil amarillo y gorra. Además todos tienen sus accesorios, como spray para gamuza, cepillo y otras herramientas de trabajo, las cuales, según Francisco, serán a la larga la columna vertebral del negocio, pues no todo será el brillo del zapato.

“No me quiero quedar nada más con la boleada”, dijo.

Tras su lanzamiento oficial en mayo de 2015, Bolero Lero ha boleado 700 pares de zapatos con más de 1,000 clientes. Por el momento el servicio cubre sólo el DF (en especial las zonas de Interlomas, Colonia Roma, Polanco y Reforma), aunque esperan seguirse expandiendo.

Y ustedes, chilangos, ¿se dan grasa?