Matilde Montoya partió desde el supuesto de que todas las personas deberíamos tener los mismos derechos intelectuales y civiles. Hoy seguimos celebrando su valor.💜

Hubo un tiempo en el que las mujeres en México no tenían permitido acceder a la educación universitaria. Aunque eventualmente se les dio acceso a las universidades, en muchas ocasiones habían carreras que se consideraban alejadas de la naturaleza femenina y que, por lo mismo, eran solamente estudiadas por hombres: el derecho y la medicina eran dos de ellas. Esto fue así hasta que hace 142 años Matilde Montoya se propuso hacer historia y convertirse enla primera médica del país. Aquí te contamos su historia y lo que su esfuerzo sigue significando.

Matilde Montoya nacióen la Ciudad de México el 14 de marzo de 1857 y desde su primera infancia demostró una enorme inteligencia. Su empeño la llevo a examinarse exitosamente como partera a los 14 años en Morelos y trabajar como tal hasta que volvió a la Ciudad de México y se propuso, ante todo, volverse médica.

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La primera doctora de México

AunqueLa Ley de Instrucción Públicay la Constituciónno prohibían que las mujeres estudiaran medicina, las concepciones sociales de la época concebían que no era natural que una mujer se desenvolviera en un entorno como el de la medicina. Hasta ese entonces, las mujeres sólo habían podido auxiliar desde la enfermería y partería, debido a que se creía que esa labor de cuidado y servicio se adecuaba más a los roles del género. Contra las adversidades, Matilde Montoya se recibió como médica el24 de agosto de 1887. Su logro fue recibido con opiniones mixtas, desde quien celebraba su tenacidad, hasta quien sostenía que lo que había hecho Montoya era antinatural y egoísta. Sin embargo, ella ejerció como doctora con alegría hasta su muerte el 26 de enero de 1938.

Matilde Montoya inspiró a decenas mujeres de la época a adentrarse en el área de la salud. Hoy, a más de 100 años de que se le reconociera como la primera mujer doctora en México, debemos reconocer lo que sigue significando su esfuerzo.

matilde montoya médica
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Otros momentos importantes en la historia de la educación para las mujeres

La fuerza de voluntad de Matilde Montoya demostró que el género no tenía nada que ver con la capacidad para aprender. Fue así que para 1910 de los 116 títulos profesionales otorgados, 8 fueron para mujeres: algunas de ellas parteras, médicas, dentistas, abogadas y hasta químicas. Sí, la diferencia entre la cantidad de hombres y mujeres que accedían a una educación superior era abismal, pero el cambio estaba sucediendo.

Esto siguió creciendo entre los años 40 y 70 en México, cuando las mujeres comenzaron a conformar alrededor del 20% en la matrícula de las universidades en México. En las décadas de los 80, 90 y 00 las cifras continuaron aumentando, donde ahora las mujeres forman más del 50% de la matrícula en la educación a nivel superior en el país.

A pesar de estos enormes logros, no debemos ignorar que sigue existiendo una diferenciación económica y social que afecta gravemente a las mujeres, vayan o no a la universidad. Esto ha sido claramente evidenciado en el marco de la pandemia por Covid-19 que ha resultado en que más de 54,000 mujeres dejaron la universidad o posgrado en México. Muchas otras mujeres han tenido que abandonar sus trabajos como profesionistas, forzadas por obligaciones de cuidado. Todo esto nos recuerda que hay mucho camino por andar en aras de la paridad de género.

Matilde Montoya fue una pionera en el mundo de la medicina y la educación que abrió el camino para que muchas otras mujeres tuvieran la oportunidad de estudiar. ¿Te gustó este recorrido histórico? No te pierdas también a estas 5 mujeres que se rifaron en la Revolución Mexicana.