Una historia sabrosa

Los hermanos Carlos, Alejandro y Arturo Lezama nacieron en el DF. A diferencia de muchas familias chilangas, sus cumpleaños solían celebrarse con platillos de cocina yucateca tradicional. Nunca faltaron los sabutes, panuchitos y papadzules.

La raíz peninsular de la familia viene de dos generaciones atrás. De la abuela ‘Mayita’ (nombre de cariño de Manuela Cervera), heredera de un gran sazón.

Mayita enseñó todo sobre cocina yucateca a Doña Mari (la nana), a su hija y a sus nietos: “Mi mamá es el control de calidad. Es la que siempre rectifica la sazón de lo que servimos. Estamos tan confiados en ella que en las mesas no ponemos saleros”.

La casa en la que Carlos, Alejandro y Arturo crecieron es el restaurante Hanal K’u (que en maya significa Manjar de Dios). Cuando empezaron como el Rincón de Mayita, el comedor ocupaba sólo el garage de las instalaciones. Al paso de ocho años el restaurante lo consumió todo (hoy, en el patio trasero de la casa hay un área para niños y las habitaciones funcionan como oficinas y bodegas).

Aunque no estudiaron para ser restauranteros, los tres hermanos y su cuñada Paty se dedicaron al cien a Hanal K’U, un lugar que a través de la cocina transmite la cultura yucateca: en la entrada hay guayaberas, utilizan el licor de Xtanbentú (un fermento de miel, la flor del mismo nombre y anís) para flamear, para cocteles o postres y en la cocina nunca faltan las naranjitas agrias, el axiote y las tortillas hechas a mano.

Las especialidades

Cada semana hay un platillo de cocina casera que se sirve como especialidad (potaje de lentejas, queso relleno, frijol con puerco, etc.). Cuando un plato llega a la mesa, llega con toda su historia.

Los papadzules son una de las cartas fuertes: son cuatro, de buen tamaño, con una salsa espesa de pepita de calabaza y epazote “el secreto está en que hacemos una infusión con el epazote”. Ya entrados en confianza, uno de los hermanos confiesa otro secreto: “No se debe hacer, porque no es la receta orginal, pero un papadzul con longaniza de Valladolid sabe delicioso”.

Para acompañarlo tienen los refrescos (en peligro de extinción) Soldado de chocolate y la Sidra Pino. Entre sus invenciones está el coctel Mayita.

Hanal K’U abre únicamente los fines de semana (13:30-18 hrs), con reservación (5523 2383/5543 3138). La comida se vende también para llevar y tienen toda la capacidad para organizar eventos y banquetes.