La Barraca Valenciana suena a una banda de música que no has oído, pero que te pondría a bailar sin dejar que te sientes. Pues el baile es en tu paladar y la música la pone la comida.

Este legendario establecimiento de cepa española, ubicado cerca del centro de Coyoacán, vive su segundo aire y pareciera que no quiere dejarlo ir. Con toda la experiencia que tienen han sabido renovarse y mantenerse.

Hay sabrosas especialidades como el osobuco de ternera, pero las tortas son motivo suficiente para esperar mesa. Quedarás tan satisfecho de quitarte el hambre así de sabroso que te darán ganas de volver.

Las tortas comienzan por las más accesibles, como la de jamón y queso y llegan hasta las más complejas, como la de calamar al chimichurri, que está para chuparse los dedos, pedirse otra para llevar o distraer a alguien para quitarle una mordida más. La sopa es cortesía de la casa, de 14 a 18 horas, y es tan rica que más que cortesía parece un abrazo.