Casi una semana después de que la organización Consumer Reports alertara que el agua mineral Peñafiel tiene altos niveles de arsénico, la compañía reconoció este jueves que es cierto y suspendió temporalmente el envasado de ese producto en dos de sus plantas en México.

Peñafiel confirma que su agua mineral tiene altos niveles de arsénico

Peñafiel es propiedad de la empresa Keuring Dr. Pepper. Su directora de comunicación, Katie Gilroy Kariela, indicó que después de una serie de pruebas confirmaron la existencia de niveles elevados de arsénico en el agua mineral —ojo, esto no aplica para las versiones de sabor—, de acuerdo con un reporte el diario Reforma.

El agua mineral Peñafiel no es un riesgo para la salud: Profeco

Esos resultados llevaron a la suspensión de la producción y envasado de este producto en dos plantas: Tehuacán y Tlajomulco.

“La salud y la seguridad de nuestros consumidores es nuestra máxima prioridad y estamos comprometidos a resolver este problema”, indicó Gilroy.

Esto ocurre mientras la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) invesiga a dicha empresa. En un comunicado emitido el 23 de abril, la procuraduría informó que solicitó información a la empresa, está haciendo verificaciones de campo y “hará estudios de laboratorio para verificar que el producto que se está distribuyendo sea saludable”.

¿Qué daños puede causar el arsénico?

Las aguas subterráneas de varias partes de México —como Colima, según detalla este estudio–, tienen presencia de arsénico, un elemento químico natural de la corteza terrestre. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado de la gravedad del consumo humano de agua contaminada con arsénico, ya sea para beber, para preparar los alimentos o regar los cultivos.

“La exposición prolongada al arsénico a través del consumo de agua y alimentos contaminados puede causar cáncer y lesiones cutáneas. También se ha asociado a problemas de desarrollo, enfermedades cardiovasculares, neurotoxicidad y diabetes”, según la OMS.

Algunos efectos inmediatos por una intoxicación aguda con arsénico son los siguientes: vómitos, dolor abdominal, diarrea, entumecimiento u hormigueo en las manos y los pies o calambres musculares.