Comer este plato es un lujo, en especial cuando ves su precio en los restaurantes. Por más barato que lo encuentres en una fonda, no baja de $120. Pero nuestra curiosidad nos llevó a la Merced para descubrir qué tan barato nos salía hacerlo en casa.
Chile poblano
Foto: Raquel Castillo.
Este chile se cultiva en Calpan, Puebla, pero los productores no se dan abasto para surtir a la Ciudad de México. Así que puede venir de de Zacatecas, Michoacán, Sinaloa o hasta Ensenada. La chef Ana María Arroyo del restaurante Tajín, nos cuenta que este ingrediente se comenzó a importar ¡de China! Para no tener gato por liebre, fíjate en los precios, el poblano de origen chino es más barato, pica menos y sabe más a hierba.
El acitrón
Foto: Raquel Castillo.
La biznaga es un cactus que está en peligro de extinción desde hace cinco años, pero todavía lo encontramos a la venta. En “La Meche” lo ofrecen por 25 pesos la pieza, pero si no quieres que desaparezca, mejor comprar jamaica, papaya o nopal cristalizado.
Nuez de castilla
Foto: Raquel Castillo.
Este es el ingrediente que le da el sabor a la deliciosa nogada. A la Merced llega la nuez del sur de la ciudad, del Estado de México y Tlaxcala. Puedes encontrar una docena (sin pelar por 25 pesos), pero si no puedes con tanta chamba, el cuarto pelado te sale en 165. Sólo hay que hidratarlo.
Frutas
Foto: Raquel Castillo.
Parte del relleno de nuestro querido chile en nogada es la manzana, el durazno y la pera. Para que sea tradicional, estos ingredientes deberían venir de Calpan, pero dadas las condiciones climatológicas, nos debemos conformar con manzanas chihuahuenses de 20 pesos el kilo.
Las peras y duraznos criollos puede que los consigas provenientes de Puebla a un precio de entre los 15 y los 25 pesos por kilo. Y no hay que olvidar la granada, que puedes encontrar en 30 pesos el kilo o en 20 pesos cuando ya está desgranada (alcanza para cubrir cuatro chiles).