Las experiencias virtuales llegaron para quedarse. Ahora los chefs buscan una conexión gastronómica y van a ti sin importar dónde te encuentres. ¡Gracias, internet!

Brinda con los mejores

Durante una hora, desde la cocina de su casa, el chef Roberto Ruiz te enseñará las técnicas de la gastronomía mexicana y su fusión con algunas recetas de la cocina ibérica. Pregúntale lo que se te ocurra e incluso participa activamente elaborando una mezcaliña (como una caipiriña pero con mezcal) para brindar con tus compañeros de clase. Ten listos todos los ingredientes al conectarte.

conexión gastronómica
Foto: Cortesía

Reserva: Airbnb.mx

Toma nota:

Por la pandemia, el restaurante Punto MX, por el que Roberto Ruiz obtuvo una estrella Michelin, tuvo que cerrar como decenas de establecimientos chilangos. Pero su nuevo proyecto de delivery es @mx_robertoruiz. Además tiene otros restaurantes de antojería en Madrid, Lisboa y Bogotá.

Conexión gastronómica y experiencias personalizadas

Este taller gastronómico ofrece clases de cocina vía Zoom para que prepares todo desde cero. Tú escoges receta, fecha y hora. Momentos antes de la cita te llegará a casa una caja con los ingredientes para dos personas. Puedes elegir entre pizza, ravioles, risotto, focaccia, lasagna o hamburguesas.

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Informes: IG @Santavidamx Tel: 55 3988 9955, desde $750

En vivo o en video

La distribuidora especializada en vino mexicano levanta la copa en alto al ofrecernos una conexión gastronómica con más de 10 catas de cada etiqueta, con maridaje hecho a la medida. Hay con chocolate, flores comestibles, salchichas y pizza. Las experiencias son guiadas por un sommelier y puedes escoger entre tomar la cata en vivo o en un video explicativo que ellos envían.

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Reserva: IG @Tomemos_Vino Tel: 55 2668 7532, desde $700

Desayunódromo

Isaac y Erich concordaron: se tenía que hacer algo más que sólo compartir imágenes emotivas en Instagram para sortear las consecuencias de la pandemia. Por eso crearon Desayunódromo, una conexión gastronómica que genera trabajo para quienes lo necesitan.

La dinámica es sencilla: uno entra a sus redes, revisa su menú (que acostumbran cambiar cada semana) y programa su pedido vía DM para su entrega al día siguiente. Del total de las ganancias, 70 por ciento se reparte entre los empleados y el resto se usa para comprar los insumos de esta black kitchen que, lejos de haber visto el fin, sumó nuevos integrantes a su familia.

IG: @Desayunodromo, mar-dom: 9:02-11:59 h