Durante México Cocina Abierta,
Albert dio dos conferencias: una dedicada al Bulli, otra sobre su libro
de repostería Natura.
De palabra ligera, Albert
Adriá
descubrió sus secretos en los videos que conforman la selección
de su libro, todos como el nombre lo anticipa inspirados en un elemento,
paisaje o extracto en relación con la naturaleza.
Todo comenzó en Japón…
en el restaurante Mibu para sólo ocho comensales. “La esposa del
chef Ishida tenía una bola de nieve que raspaba con palillos, al centro
había un pescado.” Años después, Adriá tradujo esa imagen en un
postre, que se convirtió en el primero de la colección que dos años
y medio después dan cuerpo a su obra.
Orquídeas, troncos de árboles
(uno inspirado en el El Laberinto del Fauno de Del Toro). Cada
postre es la construcción de un paisaje comestible. En cada video,
Adriá mostró su proceso creativo: frutas mimetizadas, enramajes de
chocolate y turrones que adquieren gracias a la tecnología de
su cocina la forma de una hoja seca.
“Si ustedes ven algo de cocina
molecular en este trabajo, hágamelo saber, porque yo no veo nada”,
dijo para expresar su opinión sobre la etiqueta que se le ha puesto
a la cocina que produce el Bulli. Animando a los cocineros jóvenes
a conocer las técnicas tradicionales antes de meterse con la tecnología.
Natura está disponible
en librerías especializadas.