En diciembre pasado subió la tarifa del Metro, de 3 a 5 pesos, y una de las promesas para que los chilangos aceptaran el incremento al boleto era desaparecer a los vagoneros que ofrecen un sinfín de productos al interior de este medio de transporte.

El GDF ya negocia con estas personas, que están agrupadas en 21 organizaciones de comerciantes ambulantes, y por el momento 18 de estos grupos ya llegaron a un acuerdo para dejar de venderde manera definitiva en las instalaciones de nuestra limusina naranja.

Pero ojo, no todo es alegría, dicha y felicidad, ya que el acuerdo contempla darle a los vagoneros una lanita mensual durante tres meses, obviamente de los impuestos que tanto trabajo nos cuesta pagar a los chilangos. La idea del GDF es que con esa lanita tengan un colchón para incorporarse a una actividad formal.

Si los vagoneros firman este acuerdo, a más tardarel 10 de febrero entre 2 mil 500 y 3 mil vendedores dejarían de “trabajar” en el Metro. Podrán continuar con el comercio pero enplazas o corredores comerciales fuera del Metro.

¿Cómo la ven?