Un iceberg enorme se desprendió de Antártida y no exageramos con el adjetivo. Según los científicos, mide 5 mil 800 kilómetros cuadrados y pesa un billón de toneladas. Para que te des una idea, su tamaño equivale a casi cuatro veces la Ciudad de México (que en total mide mil 485 kilómetros cuadrados).

«Es uno de los mayores icebergs registrados y su futuro es difícil de predecir» explican expertos en un comunicado. «Puede mantenerse como una sola pieza, pero es más plausible que se rompa en varios fragmentos. Una parte del hielo puede permanecer en la zona durante décadas, mientras que otras partes podrían ir a la deriva hacia el norte».

El bloque de hielo se desprendió poco a poco de la sección Larsen C –una plataforma helada que está en la Antártida, justo al sur de nuestro continente– entre el lunes 10 de julio y este miércoles, según científicos del proyecto Midas.

Aunque suene raro el evento no es culpa del cambio climático y los expertos dicen que las causas del desprendimiento son naturales. Pero no todo son buenas noticias porque si el iceberg se derrite podría aumentar el nivel del mar.

«Se trata de un evento natural, y no somos conscientes de ningún vínculo con el cambio climático inducido por el ser humano», explica Martin O’Leary en el comunicado. «El desgajamiento deja a la sección [Larsen C] en una situación muy vulnerable».

Si te preguntas: ¿qué va a pasar con todo este asunto? Hay opiniones divididas entre los expertos.

«En los meses y años siguientes, la plataforma de hielo [Larsen C] podría volver a crecer por sí sola, o puede sufrir eventos que la partirían más y eventualmente conducirían al colapso total», explica el profesor Adrian Luckman of Swansea University. «Nuestros modelos dicen que estará menos estable, pero si colapsa lo hará en años o hasta décadas».