Chilango

Peores y mejores escenas de tiburones en el cine

iStock

Si le tenemos miedo a los tiburones, el cine ha sido culpable en gran parte. El primer blockbuster del mundo, la cinta de Steven Spielberg Tiburón, provocó gran parte de este miedo colectivo.
 
Pero esto es una falacia, según la revista National Geographic, es más fácil que mueras por una gripe que por un ataque de tiburón. Las probabilidades de esto son 1 en 63 de morir de gripe, contra 1 en 3,700,000 que mueras por el ataque de un escualo. Es mucho más probable que mueras por un mosquito, un hipopótamo o por un venado que por el ataque de un tiburón.
 
Eso si, no es tan cinematográfico una historia de un venado asesino contra misma pero de un tiburón blanco. Los tiburones son grandes actores, tanto en malas como en buenas películas.
 
Próximamente veremos otro de estos personajes en la pantalla grande con la cinta Miedo profundo, del director español Jaume Collet-Serra, pretexto ideal para hacer un recuento de las peores y mejores escenas de estos misteriosos monstruos marinos.

El primer ataque en Tiburón 

Esta primer secuencia es la que provocó pánico a muchas generaciones por meterse a nadar al mar y además, nunca se ve al tiburón, algo que hizo Steven Spielberg con maestría. Esto y la música de John Williams, quien con solo la variación de dos notas, logró crear un mayor terror, como lo que es un ataque de un tiburón.
 

Tintorera

Después del éxito comercial que fue la cinta de Spielberg, su copia mexicana no podía tardarse en aparecer. Esta cinta con Hugo Stiglitz y  Andrés García fue controversial porque se ve en pantalla la muerte de estos escualos. Excepto por eso, ¡Tintorera! Es una joya camp de René Cardona Jr.
 

Sharknado

¿Qué película de tiburones puede ser más ridícula que esta? Toda la cinta está llena de escenas inverosímiles, pero la llegada del tornado de tiburones es de los más increible visto en la pantalla. Producto del estudio The Asylum, quienes son los creadores de todo tipo de homenaje-plagio a la película de acción que esté de moda, son tan prolíficos que ya llevan 4 secuelas en tres años.
 

Open Waters

Un par de buceadores se quedan a la deriva en pleno mar abierto por el olvido de la tripulación de un barco turístico en donde hacían tours para explorar el mar. Para terminarla de amolar, justo en esa área se encuentra un banco de tiburones hambrientos. De las experiencias más claustrofóbicas que existen en este tipo de películas con un final nada esperanzador.
 

Mega Shark vs Giant Octopus

Su nombre lo dice todo un mega tiburón contra un mega pulpo, dos de los monstruos más temidos de las profundidades del mar se enfrenta en un duelo que hace palidecer a Godzilla vs King Kong. Lo mejor: Mega Shark se come un pedazo del Golden Gate.
 
 

Shark Exorcist

Si, como se escucha, en exorcista contra un tiburón. Parece que los pequeños estudios independientes cada vez intentan crear la historia más extravagante con estos personajes. En Shark Exorcist, una monja poseída por el diablo invoca al demonio para que se posesione de un tiburón blanco. Solo el Shark Exorcist podrá detenerlo. 
 

Sky Sharks

Un grupo de geólogos exploran las profundidades del hielo de la Antártica, para encontrarse con un laboratorio nazi intacto. En este lugar se enteran de la creación de un arma secreta para la guerra: tiburones mutantes que pueden volar tripulados por soldados zombis. La única manera de combinarlos es resucitando soldados norteamericanos muertos de la guerra de Vietnam.
 

También lee:

Muere el exactor de ‘Julio Regalado’

Tendremos miércoles de caos vial por maestros

NADIE saca diez en este quiz de verbos en español