El Ángel reseña de la cinta que estrena este fin de semana

La mirada de Carlitos transmite completa oscuridad, su expresión a pesar de ser angelical, encierra los pensamientos de un sociópata. Después de robar, matar a sangre fría y “enamorarse” de su cómplice, al filo de los veinte años, Carlos Eduardo Robledo Puch, es encontrado culpable de varios crímenes, en su natal Argentina.

El Ángel reseña de la cinta argentina con carga homoerótica

Así nació la leyenda de “El Ángel Negro”, “El Ángel de la Muerte” y más apodos que hacen alusión a los rizos, perfecto perfil y rasgos de inocencia dibujados en el rostro de Carlitos (Lorenzo Ferro). La cinta hace un repaso por las andanzas y motivaciones del joven Robledo Puch, poco antes de cumplir 18 años, los personajes que integran la trama tienen que ver justo con el despertar de esa edad: el sexual, moral y social.

Por momentos la atmósfera, es de una cinta policiaca con aire vintage, aunque la historia aborda de manera superficial la mente del joven criminal, el soporte lo ofrecen personajes secundarios como Ramón (Chino Darín), cómplice de Carlitos —posible romance— o los padres de este, quienes inducen al joven al robo para después asombrarse con “el mal” que encierra su inocente porte.

Al estilo Bonnie y Clyde (versión gay) el rastro criminal de la pareja, los lleva por caminos retorcidos, giros inesperados y toques de comedia involuntaria en El Ángel. La cinta le dió un empuje tremendo al cine argentino en entregas pasadas (Cannes, San Sebastián, Toronto), y no escatimo en los guiños a la década y la construcción de ambientes.

Por instantes podría remontar, al cine de Almodóvar, que en sus inicios incluía el homoerotizmo de manera implicita, y de repente el choque con escenas que se sienten superficiales concentran la narrativa en las motivaciones de el sanguinario Carlitos, que aún cumple condena en prisión.

El Ángel reseña de la cinta

Estrena este 8 de marzo en salas seleccionadas, mira aquí el tráiler oficial de la cinta.