Marina de Tavira protagoniza este montaje inspirado en la figura clásica de Antígona, en donde el mito llega a México encarnado en las mujeres que buscan a sus familiares desaparecidos. Esta pieza dolorosa, íntima, reflexiva y actual es dirigida por Sandra Félix, quien busca dar voz al dolor, las ausencias y la urgencia de la memoria colectiva.