Las redes sociales se han convertido en su baluarte: desde allí envía un mensaje de esperanza, aprendizaje y amor propio a miles de seguidores, que encuentran en sus ilustraciones un espacio de comprensión y acompañamiento. Sofía Weidner define su estilo como naíf, despreocupado y natural, nos comparte que su pasión por el dibujo y el arte visual nació en ella a temprana edad y ha permanecido vigente a lo largo de su vida.

“Desde niña he sido muy sensible. Es una característica con la que definitivamente nací y que hace que todo lo visual me atraiga demasiado, que sienta demasiado y que perciba demasiado. Ya en la adolescencia comencé a escribir viñetas con ilustraciones sobre cómo me sentía; un día las subí a internet y noté que despertaban la atención de la gente, a pesar de tratarse de algo muy personal”, señala.

Sofía weidner

Tras estudiar Diseño Textil y aterrizar su trabajo profesional en la ilustración, Sofía comenzó a darle un giro activista a su obra y a abordar temáticas como el movimiento feminista, los casos de feminicidio y situaciones de abuso que cotidianamente sufren las mujeres en nuestro país.

“Cuando comencé a compartir mis ilustraciones, me di cuenta de que quería darles un sentido social. Pensaba: ‘Yo tengo una voz mucho más fuerte, percibo cosas que no me gustan y creo que hay que hablar de esto’. Entonces comencé a abordar esos temas que quería visibilizar”.

Tal como señala Weidner, el activismo feminista está presente en su labor artística como un reflejo involuntario. Constituye una respuesta natural ante la violencia que permea en nuestra sociedad y que la ha alcanzado en lo personal.

“Realmente no lo decidí: fue la vida quien me llevó ahí. Toda mi inspiración llega por indignación y enojo, porque se trata de violencias que yo he vivido en carne propia. No me hace sentido ser artista sin hablar de los problemas sociales de nuestro país; por ahí dicen que el arte debe poner de rodillas al sistema, y a mí me parece un arte vacío si no habla de la situación que tenemos alrededor”.

A pesar de que sus ilustraciones abordan diversas situaciones de abuso y desigualdad, Sofía ha sabido convertir el dolor, la rabia y “sus demonios” en amenas imágenes llenas de color pastel y amigables mensajes; de este modo, la joven creadora busca contribuir desde las redes sociales a la formación de diversas generaciones de mujeres.

“No me interesa demostrar qué tan buena ilustradora soy. Lo que me interesa es dar el mensaje de la manera más directa, sencilla, amorosa, natural para la gente. Creo que eso es lo que define mi estilo. Yo quiero que lo vean mujeres jóvenes y que lo que yo no tuve lo tengan ellas”.

Sofía Weidner continúa trabajando primordialmente con la ilustración digital, pero también con lápiz, óleo, plumón y arte textil. Esas herramientas le han brindado un lugar en el mundo como artista y se han convertido en el vehículo de expresión para sus reflexiones, inquietudes, conocimientos y emociones.

IG: @sofiaweidner

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