Chilango

Escápate el fin a La Habana, Cuba

Javier R.M.

Te proponemos un viaje que traspase las fronteras de México. La invitación está hecha a La Habana, Cuba, un lugar en el que parece que no ha pasado el tiempo y al que no ha llegado la modernidad.

Por qué debes ir pronto

Cada vez es más accesible llegar a la isla por avión. Además, debes visitarla antes de que se occidentalice más: aún parece que el tiempo se detuvo ahí.

Qué ver, qué hacer

No era cierto lo que había imaginado de Cuba. La gente no es gente, son aves. No es un lugar bonito, es espectacular. La comida no es pobre, es sabia. El ron no es sólo un ingrediente más del mojito, es la bebida de los dioses. Aprende a prepararlo como se debe en el Hotel Nacional (hotelnacionaldecuba.com).

No te lo pierdas

El bar Floridita (floridita-cuba.com), donde Hemingway solía tomarse sus daiquiris.

Cómo llegar

Por avión hasta La Habana desde la Ciudad de México. Son cuatro horas de viaje.

Tip insider: Antes de subirte a un taxi, pregúntale la tarifa al chofer. Si no lo haces, pueden cobrarte lo que quieran.

Dónde dormir

Hay cadenas hoteleras como Meliá e Iberostar, pero lo más recomendable son los hostales –uno de los bed & breakfast con mejor relación calidad-precio es Casavana (casavanacuba.com), en Vedado, un barrio del centro de la ciudad– y, sobre todo, las casas particulares, pues puedes rentarlas enteras o sólo un cuarto para convivir con los lugareños y las familias (casahotelencuba.com).

Dónde comer

Pregúntale a los taxistas sobre los paladares (casas-restaurante) más auténticos. La isla no destaca por tener una gastronomía muy refinada, así que apuéstale a los pescados frescos y a los moros con cristianos con sabor casero.

¿Cuánto te gastarás aproximadamente?

 
(Texto tomado de la edición de la Revista Chilango, marzo de 2014, “Ahí se ven”-Te proponemos ocho planes dentro y fuera del país para escapar de la ciudad-.)
 
(También lee: Escápate un fin de semana del DF)