Todos recordamos la primera secuencia de “reservoir dogs” de Quentin Tarantino, donde los protagonistas tienen un curioso y argumentado debate sobre los pro y contras de dejar propina. El Montecristo es un club que se autodenomina el primer lugar libre de propinas en México, donde no te cobran refrescos de más y el mesero no quiere hacer su noche contigo.

Tienes que ir con reservación o pagar cover de $100 si llegas después de las 11 pm, aunque el ambiente no es fresa en su totalidad, si te enfrentas a un mini selectivo al entrar (o sea hay cadena). Superando la primera barrera de típico antro, te topas con una imagen de Maria Antonieta (si, la que mandó a su pueblo hambriento a comer pasteles) y  de Luis XV, la realeza francesa abruma un poco pero le da un toque chic tirándole a bizarro.

La música es 100% para reven, electrónica, algunos éxitos ochenteros con mezcla o mashups y absolutamente todo el pop de universo. Hay que poner atención a la ubicación de la barra, pues es una de las mejores zonas para disfrutar la noche bien servido y tendrás un espacio privilegiado para acceder a la pista.

Tienes que probar el trago de la casa: la perla rosa, una original mezcla de licor de hierbas y Nuvo (un vinito rosa espumoso con vodka) o si vas en plan más fresco pide una jarra de baby mango, esta súper buena. Es un lugar frecuentado por chavitos entre 20 y 25, aunque por ahí te topas uno que otro treintañero “forever young”.

El Montecristo es un antro para bailar sin parar, ir con todos tus amigos (estos lugares se disfrutan más con bandita) y sacar todas la presiones sin refinamientos musicales.

No hay cover de 10 a 11 de la noche.

Dress Code: Lleva tu mejor atuendo.

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