Un favorito de los sureños para el precopeo de jueves y viernes. Su carta de destilados está siempre al 2×1 y los asiduos saben sacarle provecho antes de irse al antro.

El ambiente entre semana es más relajado: verás a oficinistas o a parejas comiendo y echando un trago. Los jueves y viernes es cuando la fiesta está a tope: el lugar se llena desde la hora de la comida. Y ya a en la noche, la cosa explota: los amigos se encuentran, y el ligue fluye.

Su carta de comida se especializa en la parrilla al mezquite, el platillo estrella es el lomo al trapo. De las entradas, prueba las alcachofas o el pulpo crujiente, ambos deliciosos. Si vas con un grupo de amigos, lo más conveniente son los paquetes que incluyen un kilo de carne, guarniciones y una botella nacional o premium.

Su cava de vinos es muy amplia y destaca por sus opciones con buena relación precio calidad. La música es pop ochentero en inglés y en español. Ofrecen coctelería clásica y algunos tragos que no están en el menú –pero que sirven en otros bares del Grupo Anderson, como el Josefinas, de Porfirio’s, o los martinis de Harry’s.