Los usurpadors del tan afamado Love-Ixchell que cerró para convertrise en un hot spot de arco iris. El lugar rinde tributo a la nueva tendencia de la vida nocturna en la que en un mismo lugar, hay tres diferentes antros. Asi es, tres conceptos diferentes pero gays y de dueños diferentes. La cosa esta así: los jueves es el Ken, el viernes es el Made y el sábado es el Lust. Los tres proponen fiesta fuere de serie aunque un poco más fresona de lo que se acostumbra en el Pink Light District. Si eres electrónico empedernido, el Lust te encantará. Si tienes suerte (y según el día), verás a un modelo sin camisa que seduce a la concurrencia con su físico exquisito y un trago de cortesía.

Aquí sí respetan la igualdad, tanto chicas como chicos pagan cover ($150). El público femenino es más straight pero en general el ambiente está pintado, en su mayoría, de mera testosterona. Sigue siendoun lugar pequeño dividido en dos áreas, la de abajito es para los fumdores. Arriba todos bailan, es imposible resistirse al fuerte retumbe de los beats. Destacan elementos impecables como el sistema de sonido y la gente guapa. Se agradece que le apuesten a conceptos nuevos en la zona trendy, para así ampliar el panorama fiestero. Es gay, pero le dan la bienvenida a los bugas.